El Ayuntamiento de Sevilla ha anunciado este viernes que el Plan Respira estará operativo en el Casco Antiguo a finales de este mes de marzo y durante un periodo de pruebas de nueve meses; ello, una vez culmine el proceso de implantación de las 50 cámaras de control de accesos a las zonas de tráfico restringido del centro, de las que 43 ya se han instalado recientemente.
Así lo ha anunciado el delegado de Gobernación, Juan Carlos Cabrera, en respuesta a una pregunta formulada al respecto desde las filas del grupo municipal Izquierda Unida-Podemos a través de su portavoz, Daniel González Rojas, en la Comisión de Control y Fiscalización al Gobierno local celebrada en el Consistorio hispalense.
Cabrera se ha mostrado tajante en lo que al funcionamiento de dicho plan se refiere: "No habrá ni un paso atrás". En este sentido, ha reiterado que la iniciativa "ha venido para quedarse". No en vano, las cámaras que ya se han instalado "están haciendo capturas de imágenes" de los vehículos que transitan por esos puntos.
El delegado municipal de Gobernación ha esgrimido para el retraso en la aplicación del Plan Respira que se ha tratado de un "proceso amplio" de participación ciudadana", que ha requerido de un estudio técnico y de la aprobación del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), en el que está contemplado aquel.
Asimismo, Cabrera ha recordado las "vicisitudes" que el Plan Respira conlleva, entre ellas, el 'software' necesario para su funcionamiento. Desde el pasado 4 de septiembre se están colocando las cámaras de tráfico --en Triana se ubicarán en 15 puntos-- y "a final de marzo estará todo instalado". A partir de ese momento, estará en vigor un periodo de pruebas, información, adaptación y registro de vehículos autorizados hasta enero de 2024, "fecha en la que se procederá a sancionar a los conductores que no cumplan lo establecido en la norma".
Por su parte, el portavoz del grupo municipal IU-Podemos, Daniel González Rojas, ha criticado el "retraso injustificado" en la aplicación del Plan Respira, iniciativa acordada por su grupo municipal y el entonces alcalde Juan Espadas, en 2019, para lograr una ciudad "más inclusiva, segura y sostenible, así como para combatir los efectos del cambio climático".
El edil de la confluencia ha recordado que desde que se abordó por primera vez el Plan Respira han transcurrido "casi ocho años y dos procesos de participación ciudadana" para recoger las aportaciones y opiniones de los colectivos afectados por la medida,"sin que la ciudadanía vea ninguna mejora en la calidad de vida de las zonas objeto de reordenación".
"El Partido Popular dijo que el anterior plan de restricción de tráfico en el Casco Antiguo, el Plan Centro, era un desastre y este equipo de gobierno le compró el mensaje. Se le cambió el nombre, pero a cuatro meses de las elecciones municipales, al Respira ni se le huele", ha añadido González Rojas.
