Durante la canícula de hace justo un año realizaba, en este mismo espacio de opinión, un símil entre Europa y Berlanga (que me perdone). Decía que la UE necesita un reparto coral en el que todos los países fueran actores de los mal llamados secundarios, como en La Escopeta Nacional o Bienvenido Míster Marshall.
Reclamaba entonces, y lo hago ahora, una Europa en la que Alemania y Francia fueran Sazatornil y Pepe Isbert, pero con la influencia de los Luis Escolar, Agustín González, Mónica Randall, Antonio Ferrandis y Jose Luis López Vázquez, éste último en el papel de España. Aquel atrevido planteamiento, previo al Brexit, ha sido la clave del éxito sin precedentes del Consejo Europeo celebrado en Bruselas. Macron y Merkel eran protagonistas, pero no destacaron, permitiendo que el resto de actores pudiera culminar un final feliz.
Europa está en el momento más importante, crucial diría, desde la II Guerra Mundial. Tras la salida del Reino Unido, una demostración de insolidaridad hacia los países más castigados por la pandemia habría sido el final de Europa, tal y como hoy la conocemos. Sin embargo, va a ser el inicio. ¿De qué? Aún no se sabe, pero sí conocemos que la fiscalidad común ya es un hecho, y que la idea de una Europa, capaz de competir en influencia con Estados Unidos, China y Rusia puede ser una realidad si mantiene el mismo rumbo.
Bruselas y Estrasburgo pillan lejos de Despeñaperros. Las decisiones de los organismos europeos suenan muy lejanas, aunque influyen en nuestro día a día. Los responsables de Comunicación de instituciones como el Parlamento Europeo hacen denodados esfuerzos para acercar Bruselas a Andalucía, y la verdad, con poco éxito. La puesta en común y la solidaridad demostradas por los 27 es la mejor política de comunicación posible para que los andaluces comprueben que algo ha cambiado. Se ha pasado de una sensación de abandono, a una de orgullo colectivo. Los líderes europeos respiraron aliviados tras 90 horas de negociación, y los ciudadanos, reconfortados, esperan que el proyecto europeo supere el Brexit, la pandemia y nacionalismos y extremismos para que seamos los Estados Unidos de Europa.
