El Valencia de Gennaro Gattuso se ha convertido en las seis primeras jornadas de LaLiga Santander en un equipo de todo o nada, sin término medio después de que haya ganado tres de los partidos disputados y perdido los otros tres, sin conocer el empate en este arranque de la competición.
Hasta la fecha, el Valencia ha jugado en su estadio cuatro partidos en estas seis jornadas, con un balance de tres victorias y una derrota, mientras que sus dos partidos lejos de Mestalla se saldaron con derrota, lo que supone haber sumado nueve de los dieciocho puntos disputados que le sitúan en la zona media de la clasificación.
El propio Gattuso ha reconocido que la asignatura pendiente en este inicio de temporada es trasladar las buenas sensaciones que transmite el equipo en los partidos como local a los duelos que disputa como visitante, donde baja su rendimiento y su puntería, especialmente en el último desplazamiento en el que se enfrentó al Rayo.
Precisamente, otra lectura positiva del equipo de Rino Gattuso es su evolución ofensiva en los partidos disputados en Mestalla, ya que tras los dos primeros partidos en los que su buen juego no estuvo acompañado de acierto ante la meta rival, en los dos últimos choques ante su público ha sumado ocho goles.
Así, el Valencia abrió el curso con una victoria por la mínima ante el Girona gracias a un gol de Carlos Soler de penalti pero que el conjunto valencianista disputó con diez jugadores prácticamente durante toda la segunda parte por expulsión de Cömert, mientras que al siguiente encuentro en casa cayó ante el Atlético (0-1) con un buen juego pero en el que estuvo falto de pegada.
Pero esta deficiencia ofensiva cambio radicalmente en los dos siguientes partidos ante su público, que vio como goleaba primero al Getafe por 5-1 con un arranque fulgurante con tres goles en el primer cuarto de hora y otra al Celta por 3-0, en dos duelos a los que a su buen juego combinativo acompañó una notable efectividad anotadora.
A la derrota ante el Atlético en casa, el Valencia suma otras dos en sus dos únicas visitas que ha realizado hasta el momento, si bien la imagen ofrecida no fue la misma porque ante el Athletic cayó por 1-0 en la segunda jornada liguera en un partido en el que pudo hacer más de no haberle penalizado su falta de gol en esos momentos.
Muy distinta fue la imagen ofrecida en Vallecas, donde el equipo fue una sombra de lo que había ofrecido en cuanto a entrega y juego en las cuatro anteriores jornadas y en especial solo una semana antes en el duelo frente al Getafe. Ante el Rayo fue todo mal, con un gol tempranero a los cuatro minutos del equipo y un tanto en propia puerta al poco de iniciarse la segunda parte que condenó a un Valencia sin actitud ni juego que solo acortó distancias en el tiempo añadido (1-2).
Nada más acabar el triunfo ante el Celta del pasado sábado, Gattuso expuso su deseo y la necesidad de trasladar la actitud y el compromiso que exhibe el equipo en Mestalla a los partidos que juega lejos de su feudo para consolidar los objetivos del club.
Para saber si los deseos del técnico italiano se cumplen el Valencia deberá esperar al 2 de octubre, cuando visitará al Espanyol en una séptima jornada de Liga que llegará tras el parón por los partidos de selecciones de los próximos días.
