El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la comisión ejecutiva de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente, ha aprobado el inicio del expediente de resolución del contrato para el entoldamiento de una veintena de calles del Casco Antiguo dada la imposibilidad por parte de la empresa adjudicataria de cumplir con lo comprometido. El contrato que se rescinde tenía una vigencia de tres años y un importe de 669.000 euros. La Gerencia aprueba, además, la incautación de la garantía depositada por parte de la empresa e inicia los trámites para un nuevo expediente de contratación para la ejecución de este servicio de entoldamiento a partir de 2022.
En paralelo, tras un análisis técnico, jurídico y económico, se ha concluido que procede, de acuerdo con la Ley de Contratos, la ejecución de "medidas indispensables" para evitar un "grave trastorno" al servicio público. Por un lado, se considera necesario dotar de sombra las dos áreas previstas en el contrato que se rescinde que afectan al transporte público. Es decir, la Campana, donde se ubica la parada de Tussam, y la Plaza del Duque, área empleada por el servicio del taxi. En segundo lugar, se estima necesario configurar un eje transversal peatonal con toldos en la zona comercial del Casco Histórico que está conformado por las calles Velázquez, O’Donnell, Tetuán y Sierpes.
De acuerdo con la Ley de Contratos, procede ordenar a la empresa adjudicataria que ejecute estas medidas indispensables en un plazo de cinco días y con un presupuesto estimado en función del coste de este mismo servicio el año pasado. Para ello, empleará los toldos de titularidad municipal almacenados por parte del Ayuntamiento y que se han instalado en años anteriores. En caso de que no lo ejecute, el Ayuntamiento tendrá la posibilidad de contratar este servicio con el mismo presupuesto con otra empresa.
En cualquier caso, y con independencia de estas medidas indispensables, la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente resolverá el contrato que se firmó con la empresa adjudicataria por un periodo de tres años y un importe de 669.000 euros firmado el pasado 31 de mayo e incautará la garantía depositada en el acto de firma del contrato. Se inicia, además, el nuevo proceso de tramitación para que el nuevo contrato entre en vigor a partir de 2022.
El contrato que se rescinde se había planificado por un periodo de tres años para dar estabilidad a este servicio e incluía por primera vez la adquisición de un nuevo sistema de toldos para toda la ciudad. Estaba prevista su instalación en el mes de junio. Sin embargo, la empresa adjudicataria indicó en los dos proyectos presentados que no podía suministrar en tiempo y forma los materiales previstos en la oferta presentada y recogidos en el contrato firmado entre las dos partes, motivo por el cual ha sido necesario iniciar el expediente de resolución.