"
El momento es el idóneo". Con estas palabras y con un
acuerdo ya cerrado con la
empresa promotora del hotel de 5 estrellas en la antigua sede de El Corte Inglés, en la esquina con O'Donnell, el
alcalde de la ciudad, Juan Espadas, ha anunciado que
desde noviembre y hasta la primavera (finales de marzo, aproximadamente), la
Plaza de la Magdalena se cerrará con un vallado para acometer su
peatonalización. Se incorporarán así al centro de la ciudad
1.500 metros cuadrados de uso exclusivo para el peatón y se recuperará un espacio "para estar, no para cruzar de un sitio a otro".
La intervención, de
900.000 euros repartidos entre Emasesa y la promotora del hotel, implicará una
reordenación del tráfico público y privado, la reubicación de los dos kioscos actuales dentro del mismo perímetro de la plaza, la sustitución de las redes de saneamiento y abastecimiento y la plantación de más árboles.
En cuanto al tráfico, los autobuses de Tussam pasarán a tener su parada en Julio César. Los coches que entren por Méndez Núñez girarán a la izquierda buscando
San Pablo, que tendrá ahora
doble sentido, garantizando así el acceso de los coches al aparcamiento de El Corte Inglés. El parking que hay en la misma plaza justo a la entrada de Rioja, tendrán acceso desde Méndez Núñez y Murillo tendrá un uso restringido.
La intervención de la plaza servirá, en palabras del alcalde, para realzar su elemento más característico: la
fuente barroca. Se eliminarán los setos que ahora la rodean y se mantendrá la
piedra de Tarifa. En caso de encontrarse adoquines cuando se levante la plaza, estos se reutilizarán. El resto del pavimento será de color gris.
En materia de arbolado,
se respetarán los naranjos y magnolios que hay ahora y se sumarán cuatro alcorques para plantar palmeras.
Javier Illán, del grupo promotor del hotel, ha adelantado que las obras están muy avanzadas, de forma que en primavera "podríamos inaugurar". "Esperemos que podamos disfrutar la Semana Santa", ha confiado. En este punto, el alcalde Juan Espadas se ha decantado por la prudencia. La obra en la Magdalena se puede hacer ahora con un vallado completo porque no habrá Cabalgata por allí y porque el tránsito de personas ha caído considerablemente por la pandemia. Los trabajos "incluyen -ha abundado- la previsión en caso de que haya procesiones", un extremo que, ha recordado, compete en última instancia al Consejo de Cofradías y al Arzobispado siguiendo las indicaciones de las autoridades sanitarias.
Esta actuación en la Magdalena, consensuada con la comisión de Patrimonio, se suma a la de la Cruz Roja y a la del Paseo Torneo. Tras ella, quedará por definir la peatonalización de Baños hasta Ponce de León, proyecto vinculado a la ampliación del tranvía. El alcalde Juan Espadas ha remarcado que este mandato será el de las actuaciones sostenibles en materia urbanística y de movilidad.