La traición vuelve a atacar. Daña un periódico con apellido andaluz, que quisiera parecer correo de noticias, pero desde su compra por capital exterior se ha vuelto tan centralista para llamarnos región. Una región es otra cosa. En Europa se llaman departamentos, condados, länder, sólo en Italia se mantiene el nombre sólo un calificativo, por la artificialidad de su sistema. En el Estado español se llamaron reinos, pero eso recordaba demasiado el efecto de una conquista guerrera y lo deshicieron y descompusieron en provincias, para enfrentar y dominar mejor cada trozo de territorio. Una región es otra cosa, Una región es un espacio de territorio indeterminado, pero habitualmente mayor que un estado. Una región es Europa, o el Mediterráneo, por ejemplo.
En el Estado español se adoptó el término precisamente porque no encontraron otra forma de definir las agrupaciones de provincias, al carecer completamente de personalidad jurídica y por tanto de competencias. La “región” fue un término nominal, sin significado alguno, pues lo conveniente para el sistema era y es la provincia como elemento útil para dominar gracias en gran medida a su capacidad de división y enfrentamiento. Porque tenían y tienen muy claro que dividir es su forma de vencer.
El intento de involución del centralismo le hace volver a términos desfasados con que minimizar a la Comunidad Autónoma, para patentizar quien tiene el poder. Aunque Andalucía no ha podido ejercer plenamente su Autonomía contra esa depredación centralista, debido al nulo interés de sus dirigentes antes y ahora, tiene los medios para desarrollar su Estatuto y terminar con la dependencia del centro, más que resistente opuesta a su reconocimiento como Comunidad Autónoma. Lo obtendrá en cuanto un equipo realmente andaluz, preocupado por su bienestar, utilice los medios adecuados, que están en Andalucía, olvidados de forma consciente por esos políticos, igual que determinados informadores, muy pseudos, ignoran a conciencia que Andalucía no es una región. Es una Comunidad Autónoma, aunque les pese.