ArianeGroup va a reducir sus efectivos en Francia y Alemania en 600 empleos el año próximo para ajustar su dispositivo ante los retrasos y los sobrecostos de su nueva generación de cohetes Ariane 6 y ante el tirón de la competencia, y muy particularmente del estadounidense Space X.
Fuentes de esta filial de Airbus y de Safran confirmaron este viernes a Efe la reestructuración anunciada a los representantes de los trabajadores, que se llevará a cabo sin despidos y sin cierre de centros de trabajo, y que no afectará a puestos de producción.
Las fuentes precisaron que las negociaciones con los sindicatos sobre la eliminación de los empleos de "un máximo de 600 personas" comenzarán a principios del mes de octubre.
Entre los principales objetivos está aumentar la competitividad de cara al Ariane 6, cuyo primer lanzamiento ha tenido que ser aplazado hasta el segundo trimestre de 2022 por dificultades técnicas a las que se han venido a añadir las consecuencias de la crisis sanitaria.
Un acuerdo suscrito este verano con la Agencia Espacial Europea (ESA) le garantiza cuatro lanzamientos institucionales al año y tanto Francia como Alemania le darán un respaldo suplementario.
La cuestión ahora es qué parte del pastel de los lanzamientos de satélites puede conquistar en un mercado marcado por la reducción de precios con la irrupción de otros actores, y en particular de Space X.
Airbus tiene una plantilla de 7.600 trabajadores y el pasado año facturó 2.500 millones de euros.