El secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y jefe negociador palestino, Saeb Erekat, responsabilizó hoy al Gobierno de Israel por el ataque en el que murió quemado un bebé palestino y sufrieron heridas graves tres familiares.
"Consideramos al Gobierno de Israel totalmente responsable del brutal asesinato del bebé Alí Saad Dawabsha, de año y medio, y de las heridas a su madre y hermana. Esta es una consecuencia directa de décadas de impunidad que el Ejecutivo israelí ha dado al terrorismo colono", denunció, en un comunicado.
El ataque tuvo lugar esta madrugada cuando supuestos colonos extremistas judíos lanzaron cócteles molotov contra dos viviendas palestinas en la localidad de Duma, cerca de Nablus.
Algunas de las víctimas sufren quemaduras en más de 70 por ciento de su cuerpo y están en estado de extrema gravedad.
"Desde 2004, ha habido más de 11.000 ataques de colonos contra viviendas, coches, iglesias, mezquitas, árboles y otras propiedades palestinas con total impunidad", aseguró Erekat.
El alto cargo palestino estimó que "no se puede separar el ataque bárbaro de esta madrugada en Duma de la reciente aprobación de asentamientos por parte del Gobierno israelí, que representa una coalición nacional israelí para las colonias y el apartheid", aseveró.
"Con la continua aprobación de asentamientos y la incitación contra la presencia palestina, incluidos llamamientos a reconocer Israel como el Estado judío, el Gobierno israelí ha pavimentado el camino para este acto brutal", opinó Erekat, para quien actos como éste son consecuencia de una "cultura de odio" incentivada por las autoridades israelíes y de la "impunidad" que tolera la comunidad internacional.
"Instamos a la comunidad internacional a que acabe con su política de declaraciones vacías y que finalmente haga algo para proteger a los palestinos. Ejercitar los derechos inalienables del pueblo palestino, incluida su protección y el fin de la ocupación, es una responsabilidad internacional", señaló.
Según fuentes policiales israelíes, la principal sospecha, a raíz de las inscripciones en hebreo y la estrella de David que aparecieron pintados en el lugar de los hechos, es que el incendio haya sido un ataque de un grupo radical de colonos.
En las paredes fuera de la vivienda incendiada aparecieron pintadas que decían "Larga vida al Mesías", "Venganza" y "Lista de precios", expresión ésta utilizada para señalar que un daño a los colonos o la colonización debe ser "pagado" con otro daño a los palestinos.
Desde hace varios años, colonos extremistas siguen la estrategia de atacar a civiles palestinos o sus propiedades y, también, a miembros del Ejército o la Policía israelí en venganza por decisiones contra la colonización judía de Cisjordania.
Los ataques de hoy tienen lugar después de que el martes se demoliesen dos edificios en la colonia de Beit El y se evacuase a cientos de colonos que protestaban en un asentamiento abandonado hace diez años en el norte de Cisjordania al que exigían volver.
La demolición ha provocado fuertes críticas al Gobierno israelí por parte de los sectores más derechistas y el movimiento colono, pese a que esta fue ordenada por el Tribunal Supremo, que consideró ilegales los dos edificios, levantados sobre tierra de un particular palestino (para la comunidad internacional todos lo son).
