El Pleno seguirá este martes con la réplica del PSOE e IU
El candidato popular a la Presidencia de la Junta de Extremadura, José Antonio Monago, ha subrayado este martes que gobernará de acuerdo a su programa, ideas y valores, aunque con voluntad de alcanzar acuerdos con otras formaciones políticas, como IU, ya que ha recogido el grueso de "mandamientos" de la coalición para abstenerse en la votación.
La sede de la Asamblea de Extremadura, en Mérida, ha acogido esta tarde el discurso de investidura de Monago, en la primera jornada de una sesión plenaria que continuará mañana con la réplica del PSOE e IU y en la que se prevé que no alcance la mayoría absoluta para ser nombrado presidente. Al Pleno ha asistido el vicesecretario de Política Autonómica del PP, Javier Arenas; y el secretario de Comunicación y ex presidente del PP extremeño, Carlos Floriano.
Al inicio de su discurso, de una hora y veinte minutos de duración, Monago ha tenido palabras de recuerdo para las víctimas de la trágica explosión ocurrida este sábado en una fábrica de armas de El Gordo (Cáceres).
A partir de ahí, el candidato popular, que ha dicho que Extremadura no es ni de izquierda ni de derechas, ha lanzado guiños al PSOE y a IU, de cuya abstención depende para acceder al cargo y cuya alusión ha provocado los primeros aplausos de la tarde desde la bancada popular.
Monago ha agradecido el trabajo del PSOE durante 28 años y ha expresado su deseo de dar continuidad a la "disposición al pacto" del presidente en funciones de la Junta, Guillermo Fernández Vara.
También se ha dirigido a IU con la "mano tendida" y ha felicitado a sus tres diputados por su regreso a la Asamblea después de una legislatura como fuerza extraparlamentaria.
El candidato popular ha recogido de una u otra forma los doce "mandamientos" de IU para abstenerse en la investidura, salvo el "no" de la coalición a la refinería de petróleo, al que no ha aludido.
Monago ha explicado que el 22 de mayo Extremadura apostó por el cambio, lo que se ha traducido en una Cámara plural y sin mayoría absoluta que necesitará de una "voluntad de entendimiento" que no se limitará solo a los partidos políticos.
No obstante, ha advertido de que actuará de acuerdo con su programa de gobierno, ideas y valores.
A su juicio, Extremadura exige la formación de un gobierno "abierto y estable", con un programa capaz de afrontar los graves problemas que tiene la sociedad extremeña y con "vocación de agotar la legislatura".
En esta línea, ha considerado que "se puede construir Extremadura desde el gobierno y desde la oposición" y ha convocado a los presentes al "realismo" y a la "unidad".
También ha subrayado que ésta será la "legislatura de las personas", ya que sin atender a ellas no será posible ni la regeneración política ni el empleo, la "piedra angular" de su gobierno.
Para los primeros cien días de gobierno, ha anunciado planes específicos contra el paro juvenil y femenino y la creación de un grupo de trabajo de máximo nivel encargado de elaborar una propuesta de racionalización de la Administración pública.
En línea con las peticiones de IU, ha anunciado que modulará el impuesto de sucesiones y que instará a Madrid a recuperar el de patrimonio, si así lo decide la Asamblea.
Pedirá de manera urgente el anticipo del 50 por ciento de la deuda histórica, eliminará el céntimo sanitario, reducirá de once a siete las consejerías, recortará a la mitad los altos cargos y los puestos de libre designación, y hará un reforma integral del sector público.
La ovación más entusiasta de sus compañeros ha sido cuando ha asegurado que no será "el palmero de Madrid ni de Lisboa" respecto al tren de alta velocidad a Extremadura, ya que es "innegociable".
Monago, que ha hecho un discurso de presente y de futuro, ha invitado a la "esperanza", a pesar de que habrá que "trabajar duro".