El ministro de Sanidad alemán, Karl Lauterbach, apostó este sábado por la vacuna obligatoria porque, dijo, una infección con ómicron "no inmuniza necesariamente ante la próxima variante" y nadie puede garantizar que esta no se transforme en más peligrosa.
"Una infección con ómicron no inmuniza necesariamente ante la próxima variante. La creencia de que la variante ómicron es el fin de la pandemia es ingenua", advirtió el ministro, en una entrevista para el diario "Die Welt".
"Nadie puede garantizar que no se transforme en una variante mucho más peligrosa," alertó.
Lauterbach expresó el convencimiento de que la vacuna obligatoria contribuirá a mejorar la protección de la población, aunque habrá personas que se quedarán fuera y no se vacunarán, incluso cuando sea preceptivo.
En Alemania, el primer debate parlamentario sobre la vacunación obligatoria no tendrá lugar hasta la última semana de enero, en lugar de a principios de año tal y como estaba previsto inicialmente.
No obstante, el canciller Olaf Scholz y el ministro de Sanidad Lauterbach mantienen como objetivo que el proceso legislativo quede completado "en el primer trimestre del año", sin que esté claro cuándo entraría en vigor la nueva ley.
Los poderes regionales reclamaron por ello este viernes "una hoja de ruta" para la implementación, así como "velocidad y liderazgo", ya que, en palabras del primer ministro del "Land" de Renania del Norte -Westfalia, Henrik Wüst, "no debe surgir la sensación de que esta cuestión central se usa para juegos tácticos políticos".