Jugadores y técnicos del equipo de baloncesto de Málaga se hallan a la espera del protocolo que tiene que hacer público la ACB
Los jugadores y el cuerpo técnico del Unicaja se sometieron este lunes a los test serológicos previos a la reanudación de la actividad, paralizada a mediados de marzo por el coronavirus, pero no volverán al trabajo, con limitaciones, hasta dentro de unos días, cuando se conozca el protocolo de la ACB.
Desde primera hora de la mañana, los integrantes de los equipos masculino (Liga Endesa) y femenino (Liga 2) del Uniaja llegaron por turnos al pabellón malagueño de Los Guindos para hacerse estas pruebas, según informó el club.
También se unieron a ellos los familiares con los que están pasando el confinamiento en sus respectivos domicilios como consecuencia del estado de alarma vigente en España por la pandemia.
En estas instalaciones, donde tiene su sede la entidad cajista, les aguardaban a su llegada el fisioterapeuta Mario Bárbara, con todo el material necesario, y personal sanitario de una clínica malagueña que llevó a cabo y supervisó el proceso.
En un par de días, los dirigentes del Unicaja esperan tener los resultados de las pruebas para que los jugadores comiencen el trabajo individual como tenían previsto, aunque para ello aguardarán al protocolo definitivo que establezca la ACB.
En un principio, según el plan previsto por el club y cuando obtengan esa confirmación, los jugadores, en grupos de no más de cuatro, empezarán a entrenarse de forma individual y en media pista cada uno, utilizando personalmente su balón y su toalla.
No estarán en esta primera fase de entrenamiento físico o tiro a canasta el alero francés Axel Toupane, que se recupera en su país de una intervención de tendón de Aquiles; el escolta Jaime Fernández, que será operado este jueves en Madrid de ambos talones; ni el escolta serbio Dragan Milosavljevic, convaleciente de una grave lesión de rodilla.