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Málaga

Vecinos del centro denuncian inseguridad y ruido por "la falta de actuación policial"

La Plaza San Francisco se convierte en punto de consumo droga a las puertas de la Cofradía de la Paloma

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  • Concentración de seguidores deprotivos. -
  • Seguidores del Hapoel Jerusalem alteran el descanso vecinal de madrugada en Plaza Uncibay
"Hemos pasado de las reuniones para hacer botellón, al consumo de estupefacientes durante la madrugada de los fines de semana". Así describen varios vecinos de la plaza San Francisco el creciente aumento de la inseguridad ciudadana en ese punto de la ciudad, próximo a la calle Carretería, donde entre las 2 y la 7 de la madrugada se concentran personas en las proximidades de dos discotecas que cierran a primeras horas del día.
 
Los residentes, que vienen quejándose al Ayuntamiento de Málaga desde hace meses por las alteraciones del descanso nocturno y los actos de vandalismo por micciones y suciedad, aseguran que realizan llamadas a la central de la Policía Local para que intervenga y levante actas, "sin que en muchas de las ocasiones se lleguen a presentar los agentes, o en otras, cuando llegan, observan desde los vehículos cómo se producen estos hechos y se marchan".
 
Esto es lo que, dicen, sucedió el pasado 22 de abril, sobre las seis de la mañana, cuando tras ver interrumpido su sueño pudieron comprobar desde las viviendas en la Plaza San Francisco, como en las puertas de la Cofradía de la Paloma se encontraba un grupo bebiendo y fumando una sustancia en polvo.

A las puertas de la Cofradía de la Paloma.

 
Tras comunicar a la Policía Municipal lo que sucedía para que enviara una patrulla, los agentes no hicieron acto de presencia, prosiguiendo el consumo de bebidas alcohólicas y de ruido en "una ceremonia de colegueo festivo", unos actos que están prohibidos, tal y como se recoge en la Ordenanza Municipal de Convivencia. El cuartel policial se encuentra a unos 200 metros de ese punto de la ciudad.
 
Según aseguran, la Cofradía de la Paloma ya ha denunciado en otras ocasiones ante las autoridades municipales los daños por las pintadas en paredes y puertas de su edificio, y el riesgo que supone que las colillas de los fumadores que allí se concentran sentados de madrugada, puedan prender junto a las puertas y propagarse hasta el interior del edificio religioso donde hay telas y tallas de madera.
   
Vecinos de Carretería y Plaza San Francisco solicitaron el pasado año por escrito a los concejales del Distrito Centro, Franscisco Cantos, y al edil de Seguridad y jefe de la Policía Municipal, Avelino Barrionuevo, que se instale una cámara de vigilancia en esa plaza, para poder así comprobar estas concentraciones nocturnas y sancionar a los infractores.
 
PROTESTA POR SEGUIDORES HEBREOS EN PLAZA UNCIBAY
 
A esta queja por inseguridad se ha sumado lo ocurrido esta madrugada en la Plaza Uncibay, donde clientes de varios bares musicales, en su mayoría hebreos, estuvieron durante más de una hora profiriendo cánticos y gritos previos a los encuentros de la final de la Basketball Champions League, que se celebrarán este viernes, y que la entidad Unicaja ejerce de anfitriona al asumir la organización de cuatro partidos. 
 
La Liga de Campeones FIBA tendrá hoy dos semifinales: entre Lenovo Tenerife y el Hapoel Jerusalem israelí (a las 17:30 horas), y la de Unicaja y Telekom Baskets Bonn alemán (a las 20:30 horas). El torneo movilizará hasta el domingo a unos nueve mil aficionados en el Palacio de los Deportes Martín Carpena..
   
Se calcula que unos 1.200 hinchas del Hapoel Jerusalem se han dado cita en Málaga sin entradas, por lo que se concentran en los bares musicales del centro histórico para seguir los encuentros a través de las pantallas de televisión que tienen instaladas los locales.
 
Precisamente, en la noche de este jueves, los residentes en esas calles próximas a Uncibay avisaron también a la Policía Municipal para que interviniera con el objetivo de que se controlasen los cánticos, y advirtieran a los dueños de los bares sobre el consumo de alcohol en la calle y el ruido que provocaban sus clientes.
 
Una patrulla se personó en el lugar, como se puede ver en la imágenes difundidas por la Asociación de Vecinos del Centro Antiguo, pero tras comunicar a la central la actuación de los seguidores hebreos, abandonó la zona. 
 
La Ordenanza de Convivencia Ciudadana de Málaga establece en su artículo 23 sanciones entre 301 y hasta 24.000 euros para aquellos establecimientos de hostelería que "vendan o dispensen bebidas alcohólicas para su consumo fuera del establecimiento y de las zonas anexas a los mismos debidamente autorizadas".
 
Fuente vídeo: redes socailes

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