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La Junta se hace cargo de cuatro hijos de una pareja

Tienen de plazo seis meses para una solución a su situación actual

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  • Falta de condiciones de la vivienda
  • El padre asegura que, con lo que gana por la venta de chatarra, sus hijos ?comen a diario?
La Junta de Andalucía se ha hecho cargo de los cuatro hijos de una joven pareja, que reside en una vivienda situada en la zona del Botavara de El Rinconcillo.

La pareja está formada por David Santiago Santiago, de 31 años y su esposa, Susana Cortés García, de 20. Los niños, que ahora está bajo la tutela de la Administración autonómica, tienen 1, 2, 3 y 4 años.

Según Santiago, la pasada semana “nos llevaron engañados a la Comisaría y, durante el tiempo que estuvimos allí, los niños fueron trasladados hasta un centro de la Junta en Chipiona”. Ahora, añadió el denunciante, “nos dan seis meses para que consigamos una vivienda digna y trabajo”.

El joven asegura que, en la actualidad se dedica a la venta de chatarra y también al reparto de pizzas. Con este trabajo, añade, “mis hijos comen a diario y no tienen carencias”. Sin embargo, según David Santiago, el problema “radica en la vivienda que habitamos, que yo construí en El Rinconcillo, después de haberme visto obligado a vivir con mi hija mayor y con mi mujer en una furgoneta”.

Con “mucho esfuerzo, construí una habitación, en la que vivimos los seis. Allí comemos y pasamos el día. Además, construí un cuarto de baño en el exterior de la vivienda”.

Ahora, añade el joven padre, “nos han quitado a los niños porque dicen que la vivienda no reúne las condiciones necesarias de habitabilidad”.

Minusvalía

David Santiago padece, desde pequeño, una dolencia por la que no ve en uno de sus ojos y, por el esfuerzo que realiza el otro, también tiene problemas de visión. Ante tales circunstancias, durante la jornada de ayer lunes, David Santiago y Susana Cortés pidieron una cita en la dirección administrativa de la ONCE “y la tenemos para el próximo día 25 de junio”.

Además, desde la ONCE, “nos remitieron a la Delegación de Hacienda, para que me facilite un certificado sobre el grado de minusvalía que padezco, con el fin de ver la posibilidad de que pueda llegar a vender el cupón de la     ONCE”.

También “nos hemos reunido con la asistente social del Ayuntamiento, a la búsqueda de una ayuda para poder conseguir que nuestros hijos vuelvan de nuevo con nosotros”.

Mientras tanto, la joven pareja reconoce estar “desesperada y a punto de hacer una locura”, según aseguran quienes conocen a los dos jóvenes.

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