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Sánchez pretende cobrar cinco euros para entrar en Gibraltar

Hoy martes comienza la reordenación de tráfico en los alrededores de la frontera con el Peñón

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  • Sánchez manifestó que ?el Gobierno de Zapatero ha demostrado que para España La Línea es secundaria?. -
  • El alcalde aseguró estar preparado ante cualquier acción del Gobierno español
El alcalde de La Línea de la Concepción, Alejandro Sánchez (PP), anunció ayer tarde que a partir de hoy martes comenzará la reordenación del tráfico de acceso a la aduana para aplicar la tasa de descongestión para el tráfico rodado que accede a Gibraltar, que según indicó, “no superará los cinco euros”. El objetivo tras la reodenación en los alrededores de la frontera con Gibraltar, es implantar dicha tasa dentro de dos meses.

Sánchez explicó que la tasa gravará el acceso de vehículos al Peñón y que su meta era “compensar el agravio consecuencia de las políticas erráticas del Estado” hacia el municipio linense. Esta medida, según indicó, entrará en funcionamiento para octubre. “Será dentro de unos sesenta días y previsiblemente en el puente festivo del Pilar, 12 de octubre”.

Para poner en marcha el proceso administrativo en el que se sustenta esta medida dictará una providencia, la cual irá seguida de las correspondientes comisiones informativas y su posterior aprobación por el pleno del Ayuntamiento. Este trámite no supondrá un problema para el alcalde, ya que su partido “ostenta la mayoría absoluta”. Anunció que están “preparados para cualquier contingencia que pueda llegar desde el gobierno de Zapatero”.

Sobre la cuantía, ha declarado que no superará los cinco euros. “Con el estudio técnico que se elabora, y que servirá para el debate de este asunto en los órganos del Ayuntamiento, se perfilará la cuantía definitiva para los vehículos de visitantes y que lógicamente no son residentes, así como el trazado de acceso. Lo que sí quiero dejar claro es que el lugar de cobro será en suelo inequívocamente linense”. Sobre esto último, aludió a las declaraciones que llegan desde fuentes gubernamentales en el sentido de que no admitirán tal cobro, razón por la que se llevará a efecto en un lugar que no es la carretera de acceso, que es de titularidad del Ministerio de Fomento, y estará a pocos metros de la frontera.

Tasa para gibraltareños
No quedó especialmente claro durante la intervención del primer edil linense, si los ciudadanos gibraltareños deberían someterse al pago de la citada tasa para entrar en el Peñón. “Mi voluntad” señaló Sánchez, “es que no tuvieran que pagar pero el tema está sobre la mesa y se concretará a lo largo del proceso político administrativo”.

Tasa “radical”
Aseguró el alcalde linense que sí será la cuantía mucho más alta para los camiones que transporten piedras, gravas, ladrillos o material de escombros para los rellenos de las aguas que rodean el Peñón. “Esta forma de proceder es porque con esos rellenos van a resultar afectadas las playas de Levante. Y eso no lo podemos permitir”.

La tasa de congestión, explicó, tiene ya su implantación en distintas ciudades europeas. “Nos ampara la normativa comunitaria y espero y deseo no sentir la vergüenza de que nuestro propio Gobierno de la nación lleve a una ciudad fronteriza, como es La Línea, ante el tribunal de Luxemburgo. Como tampoco espero oír y leer a diputados españoles que con sus declaraciones parecen que forman parte de la Cámara de los Comunes británica”.

Considera Alejandro Sánchez que esta tasa de congestión servirá para que la ciudad sea autosuficiente. “Queremos vivir ‘con’ Gibraltar, pero no ‘de’ Gibraltar. La Línea de la Concepción, y sus intereses como ciudad, no forma parte del Foro Tripartito de Diálogo sobre Gibraltar. Y eso se ha terminado ya porque hemos sido olvidados por este Gobierno”.

En este mismo sentido político, aseguró que iniciará una marcha hacia el Palacio de la Moncloa para reivindicar la ayuda que “legítimamente una ciudad española debe tener”. Además, se planteará un contencioso administrativo contra el Gobierno para conseguir la titularidad de la carretera actual de acceso al Peñón, “la cual fue construida en 1985 sin que La Línea tuviera la más mínima compensación por tanta servidumbre prestada y está blindada sin que el Ayuntamiento tenga potestad alguna siendo un trazado netamente urbano”.

Recordó que La Línea de la Concepción no puede permitir tener dos colas: “La de los diez mil parados que se han generado aquí, con muchas familias que lo están pasando realmente mal, y la que se forma en los quioscos de Gibraltar para comprar un cartón de tabaco y ser revendido con un beneficio de tres euros. Eso no lo quiero para mi pueblo y ante eso voy a plantar cara”.

Titularidad vía de entrada

El primer edil linense informó asimismo en su intervención ante los medios de comunicación, que su equipo de Gobierno interpondrá un contencioso para reclamar la titularidad del tramo de carretera que va desde la entrada del municipio linense hasta la frontera con Gibraltar, ya que “se otorgó su uso en 1985 sin haber recibido compensación alguna a cambio por tanta servidumbre prestada y está blindada sin que el Ayuntamiento tenga potestad alguna siendo un trazado netamente urbano”.

Sánchez se mostró dispuesto a seguir con el tema hasta el final, asegurando estar dispuesto “a llegar hasta el tribunal de Luxemburgo si hace falta”.

“Prefiero ser el alcalde que por primera vez le planta cara al Gobierno de Madrid que ser el alcalde conformista que está a un paso de que la ciudad de La Línea de la Concepción vuelva a estar como hace 30 años”.

Reacción

El Gobierno británico, declararon ayer tarde fuentes del Foreign Office, “está siguiendo esta situación muy estrechamente y ha abordado sus preocupaciones con el Ejecutivo español”.

“El Gobierno español es consciente de que son ellos los que deben resolver esta problemática”, señalaron las citadas fuentes.

La determinación del alcalde linense de seguir adelante con su controvertido plan de cobro a visitantes, sorprendió en una primera instancia a las autoridades gibraltareñas, quienes de forma urgente están estudiando qué hacer si la tasa se convierte en una realidad. Los gobiernos británico y gibraltareño habían asumido hasta ahora que el comportamiento de Sánchez era un síntoma más de un problema interno entre partidos políticos españoles. Tras su intención de seguir adelante con la iniciativa, Reino Unido planta al Gobierno de Zapatero que ofrezca solución a esta situación.

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