Ayer fue presentado el cuadro San Lucas, de Sebastián Martínez Domédel (Jaén 1615 – Madrid 1667), expuesto en la capilla de la Virgen de los Dolores de la Catedral de la ciudad, que ha sido restaurado por Néstor Prieto, restaurador del templo catedralicio. La restauración ha sido financiada por la Fundación Caja Rural de Jaén, cuyo patronato ya ha aprobado la próxima restauración de un segundo evangelista, San Juan, también atribuido a Martínez Domédel. Esta restauración se inició en mayo de 2012 y concluyó en diciembre.
Según el restaurador la obra presentaba un “mal estado de conservación”, al que atribuye factores tan adversos como el ambiental o humano. En el bastidor abundaban las roturas y fisuras que le restaban estabilidad como estructura sustentante del lienzo. Tanto el debilitamiento del lienzo como el mal estado de conservación de la capa pictórica, aconsejaron llevar a cabo una forración de la obra mediante el método tradicional 'a la gacha', empleado desde el siglo XVII con excelentes resultados.
El bastidor original fue sustituido por uno del tipo francés, para posibilitar su expansión ante posibles destensados de la tela. Tras realizar el test de solubilidad, se procedió a la limpieza del barniz oxidado. Las pérdidas de preparación fueron rellenadas con masilla tradicional, sobre la que se llevó a cabo la reintegración cromática y posterior aplicación de una capa de protección con barniz de resina natural.
El tratamiento en el marco se inició con la fijación de los estratos de dorado y policromía, para proceder a su estucado y nivelado de lagunas. Las pérdidas de dorado fueron reintegradas con oro fino, mientras que para las de policromía se empleó acuarela.
El catedrático de Historia del Arte Pedro Galera analizó la figura del pintor de la corte de Felipe IV, sucesor en el cargo de Diego Velázquez. “Fue un pintor original dentro de los artistas barrocos, muy extravagante”, dijo Galera Andreu.