El albergue de temporeros para la campaña de aceituna 2012-2013 cerró ayer sus puertas en la capital, según informaron fuentes del Patronato de Asuntos Sociales, que es quien se ha encargado de su gestión. El dispositivo de la capital, con 200 plazas, el más grande de toda la provincia, ha sido también el último en cerrar. Los temporeros e inmigrantes que aún estén por la capital serán atendidos en el centro de transeúntes, que está abierto todo el año con una capacidad de unos 40 usuarios.