La Policía Nacional y efectivos del Servicio de Emergencias Sanitarias 061 han evitado la muerte de esta persona
La Policía Nacional y efectivos del Servicio de Emergencias Sanitarias 061 han evitado la muerte de una persona que había ingerido más de 30 pastillas de un conocido ansiolítico en la capital onubense.
Los hechos sucedieron después de que el Centro de Coordinación de Emergencias EPES-061 recibiera la llamada de una persona que se interesaba por los efectos que produce la ingesta elevada de pastillas de un conocido ansiolítico, ha informado hoy la Policía Nacional en un comunicado.
Esta persona no quiso facilitar sus datos al Centro de Emergencias 061, aunque si indicó haber consumido el medicamento.
Desde el Centro de Coordinación se comunicaron los escasos datos -tan sólo se contaba con el número de teléfono- a la Sala de Operaciones de la Comisaría de Policía -Emergencias 091-.
Desde estas dependencias policiales, El Operador de Sala consiguió ubicar el punto desde dónde se había realizado la llamada telefónica e identificar a quien había realizado la misma, enviando al domicilio la dotación de un vehículo del Grupo de Atención al Ciudadano -radio-patrullas-.
Los datos obtenidos se comunicaron al Centro de Coordinación de Emergencias y al constarle a la persona que había efectuado la llamada otros intentos de autolisis, desde el Centro de Coordinación enviaron al domicilio de la misma un Equipo médico.
Mientras, la dotación del radio-patrulla había llegado al domicilio en cuestión, comprobando que la persona rechazaba la ayuda que le ofrecían a la par que les manifestaba haber vomitado las más de 30 pastillas del ansiolítico que había ingerido.
En ese momento llegó el Equipo médico enviado por EPES-061 que, tras examinar a la persona, consideró conveniente el traslado a un Hospital de la capital para su ingreso y observación.
En el prospecto del medicamento ingerido destaca que a altas dosis puede producir el coma o la muerte de una persona.