Laura Ruiz, delegada municipal de Educación, destaca la normalidad en el primer día de comienzo del curso escolar 2017/2018. “Afortunadamente, la vuelta a las aulas ha transcurrido con absoluta normalidad, sin haberse producido incidente alguno, más allá del llanto, a veces de los padres, más que de los pequeños, que por primera vez dejaban a sus hijos en el colegio”, manifestó la delegada.
Este buen arranque no quiere decir ni muchísimo menos, en palabras de la responsable municipal, que el Ayuntamiento no continúe a diario con el mantenimiento de todos los centros escolares y con lo que día a día vaya surgiendo de manera imprevista en cada colegio.
Es preciso recordar, añadió Ruiz, que son muchos los colegios con los que contamos en Algeciras y por tanto el trabajo debe ser arduo y constante para poder mantener y atender las necesidades de los mismos, primando por encima de todo, la seguridad de los alumnos, profesorado y resto de personal de administración y servicios que trabajan en nuestros centros escolares.
Por eso, la delegada municipal, quiso ha querido tener unas palabras de agradecimiento para los funcionarios municipales que han hecho un gran esfuerzo durante el periodo estival, tanto el responsable del área de Educación, como la brigada encargada del mantenimiento de los centros. No obstante, “esto no significa en absoluto que nos relajemos ni que esté todo hecho, esto es un trabajo diario y que no se puede descuidar en ningún momento”.
Laura Ruiz quiso añadir que por parte del Ayuntamiento, se le tenderá siempre una mano a la Junta para colaborar en la medida de nuestras posibilidades en un objetivo común: mejorar la calidad de los centros educativos donde los alumnos algecireños reciben su formación.
En este sentido, la delegada sí quiso manifestar su preocupación por tres de las situaciones que pueden considerarse como las más alarmantes: el estado del colegio Los Arcos, donde no se han terminado de colocar las nuevas aulas prefabricadas por parte de la Junta de Andalucía; el colegio Adalides, que sigue con el problema de tener solo dos aseos para 150 alumnos de tres años; y el CEIP Pelayo, donde las obras de ampliación del mismo no han sido programadas con el tiempo suficiente y las clases han empezado con las obras en marcha, situación que no es la más adecuada ni segura para alumnos y profesores.
No obstante, Ruiz valoró su balance del primer día de colegio en la ciudad como positivo, y se muestra ilusionada por seguir trabajando codo a codo con los directores de todos los centros educativos, a los que aprovechó la ocasión para agradecer su impagable tarea, y por supuesto con la Junta, en aquellas competencias que sean del Ayuntamiento y en otras que, sin serlo, se pueda colaborar por el único bien de los escolares. “Queda mucho por mejorar, pero trabajando duro todas las administraciones, conseguiremos una Algeciras que pueda sentirse orgullosa del estado de todos y cada uno de sus centros educativos”, concluyó la delegada.