Si hay un futbolista que entiende a la perfección lo que demanda Álvaro Cervera, ese es José Mari, el capitán del Cádiz CF. El centrocampista, natural de Rota, aterrizó en la capital gaditana el 18 de agosto del 2016 procedente del Levante UD a coste cero, y desde el primer día, prácticamente desde el primer entrenamiento, Álvaro Cervera encontró a un jugador capaz de saber en todo momento lo que necesita su equipo.
José Mari juega siempre que está disponible. Ya sea con Garrido en Segunda División o con Jens Jonsson en Primera. Entiende el fútbol del entrenador, sabe cuando hay que salir a presionar a campo rival, los momentos en los que hay que recular, si el partido requiere electricidad o pausa.
Su peor momento se produjo el 9 de diciembre del 2017, en su segunda temporada vestido de amarillo, cuando se rompía el cruzado ante el Real Zaragoza.
Esta temporada, José Mari se ha perdido hasta trece partidos de liga por lesión, un tercio de la temporada. Se lesionó en un entrenamiento antes del partido ante el Atlético de Madrid en la primera vuelta. El día que reaparecía, en Copa ante el Pontevedra, volvía a lesionarse. El capitán del Cádiz ha jugado 22 partidos en liga, uno en Copa del Rey, ha marcado un gol, de penalti ante el Elche, y ha visto cinco cartulinas amarillas.
José Mari, a sus treinta y tres años, está vinculado a la entidad gaditana hasta junio del año 2022. Como mínimo jugará seis temporadas en el Cádiz, aunque podría renovar un año más, aunque a medida que vayan pasando las temporadas, su rol en el equipo irá cambiando. Su posición, la del centro del campo, es una que el club busca reforzar. Él, como hasta ahora, seguirá dando el cien por cien en el campo.
