El Grupo de Hostelería y Construcciones y Reformas Potito ha presentado el proyecto básico y ha solicitado la licencia de obra mayor para la rehabilitación y adecuación interior para uso residencial turístico del número 8 de la calle Plocia de la capital gaditana, donde va a habilitar un total de 16 apartamentos turísticos.
El inmueble cuenta con planta baja, cuatro plantas y ático. Se trata de un edificio ya consolidado en altura y uso dominantemente residencial que actualmente cuenta con ocho viviendas unifamiliares, a razón de dos por planta.
Ubicado en un barrio muy consolidado y arraigado del centro histórico --en las inmediaciones de la plaza de San Juan de Dios, el barrio de Santa María y la calle Santo Domingo--, ofrecerá desde su cubierta una vista privilegiada de la ciudad, con la catedral a un lado y el puerto de Cádiz al otro.
El gerente del Grupo Potito, Miguel Ángel Sánchez, ha explicado que “se trata de un proyecto muy ilusionante que llevamos ideando cinco años y con el que pretendemos dar un salto cualitativo en cuanto a los servicios que allí se ofrecerán”. Según ha añadido, “aspiramos a ser un revulsivo que contribuya a la excelencia de Cádiz como destino turístico”, sin olvidar que la puesta en marcha de este proyecto supondrá la generación de “un número importante de puestos de trabajo estable y de calidad, con un perfil muy profesionalizado”.
La actuación no supondrá ampliación alguna de construcción ni de altura, sino que consistirá en una mejora sobre lo existente. De hecho, con una superficie aproximada de
241 metros cuadrados, la parcela tiene unas dimensiones más que suficientes para, como pretende el promotor, habilitar cuatro apartamentos por planta cumpliendo escrupulosamente la normativa, dimensiones y superficies que marcan tanto el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) como el resto de la normativa vigente, tanto en materia urbanística como en cuanto a dimensiones, distribución y características, en lo relativo a accesibilidad y eliminación de barreras arquitectónicas, aislamiento acústico, ahorro energético y todo el paquete de servicios exigibles.
El proyecto, que ha supuesto inversión muy importante, pretende superar las expectativas de los clientes ofreciendo “un servicio de calidad y, a la vez, comprometido con nuestro entorno”. Para ello, el Grupo Potito llevará a cabo la implantación y certificación de un Sistema de Gestión de la Calidad (Q-Calidad Turística) y Ambiental en base a las normas UNE 182001 y UNE EN ISO 14001. Con esto, según ha apuntado Sánchez, “queremos mostrar nuestro compromiso y nuestra apuesta por un turismo sostenible, el respeto al medio ambiente y la accesibilidad”.
Así, en el futuro albergará 16 apartamentos turísticos que dispondrán de un baño, salón/comedor/cocina y uno o dos dormitorios. Los más pequeños contarán con 35 metros cuadrados y el mayor, que tendrá además acceso al ático, dispondrá de 51 metros cuadrados. Según el proyecto, la superficie total construida prevista es de unos 967 metros cuadrados, incluyendo la recepción y conserjería guarda equipaje que se habilitará en la planta baja.
Igualmente, contempla otros aspectos funcionales como la instalación de una piscina de pequeñas dimensiones en la cubierta del edificio, así como la previsión de crear en la misma zona un espacio habilitado para la futura colocación de una terraza transitable con opción a la distribución de mesas, sillas, hamacas y una pequeña barra de bar con instalación de cafetería y refrigeración.
El objetivo del Grupo Potito es iniciar las obras el próximo mes de mayo, si bien es consciente de que la actual crisis sanitaria generada por el coronavirus, COVID-19, podría suponer una alteración sobre los plazos inicialmente previstos.
Aunque dicha situación impide aventurar fechas de finalización de los trabajos, se estima que éstos no se prolongarán demasiado en el tiempo, ya que, como se ha indicado antes, el edificio se encuentra actualmente en uso y se ha certificado el buen estado tanto de las viviendas como de los locales comerciales de la planta baja (dos locales comerciales y una oficina que no entran dentro de este proyecto, contando con propiedades y usos distintos).
Soluciones para los inquilinos
Según ha señalado Miguel Ángel Sánchez, antes de poner en marcha la operación se vienen manteniendo reuniones con los actuales inquilinos del edificio a fin de llegar a un acuerdo satisfactorio para ambas partes y no dejar a nadie en la calle. Así, el principio de acuerdo alcanzado implicaría que las tres familias con contratos de renta antigua que habitan en el número 8 de la calle Plocia seguirán residiendo allí de por vida de manera gratuita.
Sus nuevas casas serán tres de los apartamentos turísticos que, si bien es cierto que suponen una merma en metros cuadrados respecto a sus viviendas actuales, estarán completamente reformadas. Otra de las ventajas para estos inquilinos, en su mayoría de avanzada edad, es que se dotará a la finca de un ascensor, con las comodidades que ello conlleva.
Otras cuatro viviendas están ocupadas por cuatro familias cuyos contratos finalizan en marzo y octubre. El principio de acuerdo alcanzado con ellos implica que, aunque tendrían que convivir con las obras, residirán allí de manera gratuita hasta el mencionado mes de octubre, exentos incluso del pago de los suministros básicos. La idea, según el gerente del Grupo Potito, es facilitar su capacidad de ahorro y darles tiempo para que puedan encontrar otra vivienda.
Asimismo, con la idea de causar el menor trastorno posible a los moradores, la obra se realizará por segmentos y por altura, de manera que estas siete familias puedan vivir en una parte mientras se habilita la otra, trasladándose posteriormente a los primeros apartamentos finalizados para que puedan rematarse los restantes.