La ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha admitido que la restauración de las murallas de Cádiz es una intervención “anómala” por parte de su Departamento porque “no es frecuente que las obras del Dominio Público-Marítimo Terrestre (DMPT) nos corresponda o busquemos cómo contribuir a la restauración de un Bien de Interés Cultural (BIC)”, como éste.
Pero Ribera, que este sábado se desplazó a la capital gaditana para comprobar “con satisfacción” el avance de los trabajos que se están realizando, expresó en su comparecencia ante los medios de comunicación en la playa de Santa María del Mar el compromiso de que el Estado, a través de la Dirección General de Costas finalizará la tarea pendiente. Acompañada del jefe de la Demarcación de Costas de Andalucía Atlántico, Patricio Paullet; el diputado nacional y secretario local del PSOE, José Ramón Ortega; y el portavoz municipal socialista y candidato a la Alcaldía, Óscar Torres, la ministra justificó la intervención por “la carga de simbolismo muy importante” de “este pedacito” de patrimonio histórico” que es, además, “frontera con el Atlántico para el conjunto de los españoles”, y remarcó que los trabajos deben ser “extraordinariamente cuidadosos”, en presencia de uno de los representantes de la empresa encargada de la ejecución.
Y explicó que “nos queda todavía la restauración de los paños del Castillo de Santa Catalina, culminar este pequeño trozo de muralla, en una de las playas más emblemáticas de la ciudad y hacerlo a tiempo para que lo puedan disfrutar los vecinos y los turistas este verano” y, a partir de ahí “seguir hasta que podamos culminar esta tarea en los próximos meses y años”.
En este punto, la ministra eludió concretar detalles sobre esa tercera fase de actuación. “Esta es la tarea que hay que combinar adecuadamente con los trobajos, el calendario y la disponibilidad presupuestaria”, indicó. Ribera indicó que el Gobierno buscará “una alianza con el propio Ayuntamiento, la Diputación y, en su caso, con la Junta” para ello y para garantizar, igualmente, “atención continua” a las tareas de preservación y mantenimiento”.
La restauración de las murallas marítimas en la playa de Santa María del Mar, en los tramos comprendidos entre los Baluartes de Capuchinos y Los Mártires, y en el Castillo de Santa Catalina comenzó el pasado 1 de marzo. Los fondos destinados a esta actuación ascienden a 896.448,84 euros, provienen del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) y el plazo de ejecución es de ocho meses.
Este es uno de los dos proyectos de actuación que lleva a cabo la Demarcación de Costas en las murallas marítimas de la capital gaditana. Entre ambas iniciativas, el presupuesto suma un presupuesto total de 1.632.079,91 euros.
El otro prouecto, adjudicado al grupo empresarial público Tragsa a finales del pasado año, es la reparación de los muros de defensa y el tratamiento de la cara exterior de la muralla en el Campo del Sur, tiene un plazo de ejecución de 4 meses y está valorado en 735.601,07 euros.