La subdelegada del Gobierno en Sevilla, Felisa Panadero, ha visitado este martes el municipio de Badolatosa tras las inundaciones vividas como consecuencia de las crecidas del Genil, afluente del río Guadalquivir. Durante su visita, y según el Ayuntamiento, la subdelegada y el primer edil han analizado un real decreto “al que tanto Corporaciones locales, como familias y establecimientos industriales o comerciales pueden acogerse para tramitar las ayudas pertinentes en este tipo de catástrofes”.
Fue el pasado Miércoles Santo cuando comenzaron las labores de limpieza y recuperación del casco urbano de Badolatosa tras las crecidas del Genil. La reducción del volumen de agua que desembalsaba el pantano del Iznájar propiciaba entonces la bajada de la cota del río Genil y permitía, al fin, el inicio de estas labores de saneamiento y restauración. No obstante, las precipitaciones caídas la tarde de este último lunes motivaron una nueva crecida del Genil y otra anegación del entorno de la calle Pablo Iglesias.
La subdelegada del Gobierno se ha comprometido a realizar la limpieza del cauce de modo inmediato, una vez el tiempo se estabilice, así como a estudiar a más largo plazo la actuación a realizar con el fin de que se dé “una solución definitiva a este problema”.
Además, junto al alcalde Antonio Manuel González habría analizado el contenido de un real decreto “al que tanto Corporaciones locales, como familias y/o establecimientos industriales o comerciales pueden acogerse”.
Tras el encuentro, el alcalde se manifestaba “parcialmente satisfecho por los compromisos adquiridos, pues son ya más de cinco años demandando una solución y redactando informes y proyectos, que han ido pasando de unas administraciones a otras, dado el trasvase de competencias producido entre Gobierno Central y Autónomo (primero del Gobierno Central, luego de la Junta de Andalucía y ahora nuevamente del Gobierno Central), sin que hayamos llegado a buen puerto; por ello, aunque ahora parezca que de una vez por todas este problema va a ser estudiado, debemos ser cautos”.
Destacó que la amenaza de un nuevo desbordamiento sigue presente mientras no cesen las previsiones de nuevas lluvias o Iznájar se vea otra vez obligado a aumentar su caudal de desembalse.
De hecho, la Agencia Estatal de Metereología (Aemet) ha activado la alerta amarilla por fuertes precipitaciones para las provincias de Sevilla, Huelva y Cádiz para este miércoles, precipitaciones que se esperan localmente fuertes o persistentes en todo el oeste de Andalucía.