El director deportivo admite que la situación no se parece ni por asomo a lo que se esperaba del equipo
No se estaba prodigando demasiado ante los medios de comunicación el exguardameta, pero la crisis de resultados le ha obligado a dar la cara. A dar su versión de unos resultados que tienen al Sevilla Fútbol Club más cerca de abajo que de arriba. Fuera de la zona europea. Monchi, no podía ser de otra manera, no podía esconder que la coyuntura es para estar preocupados.
“La situación es mala, no es ni por asomo la esperada. Estamos por debajo de lo esperado. Es para estar preocupados y para buscar soluciones para remontar el vuelo. Estar el once en la tabla es motivo de preocupación para un equipo como el Sevilla”, comentaba el director deportivo sevillista, claro y contundente a la hora de enfatizar que “no soy nadie para hablar de soluciones, pero hay que buscarlas. Están dentro del vestuario. Soy el que ficha a los jugadores, al entrenador… Soy el máximo responsable de la situación actual. Van a encontrar la solución. La situación tiene que hacernos despertar. Este Sevilla no puede estar el once”.
Sin excusas a la hora de hablar de lo deportivo, aunque todavía confiado en un entrenador (Marcelino García Toral) incapaz de sacarle rendimiento a una plantilla igual sobrevalorada, pero no tan mala como se está demostrando las últimas semanas. “La confianza en el entrenador es la misma que había cuando se decidió contratarlo. Tanto el presidente y yo sabemos lo que pensamos sobre esta cuestión”, comentaba el de San Fernando.
Confianza en el preparador asturiano y sabedor del camino a seguir para escalar puestos en la tabla clasificatoria de Primera. “El equipo tiene que corregir su irregularidad. Que se dan en distintos partidos y en uno mismo. Es una cuestión de ser constante. En Málaga volvimos a tropezar en la misma piedra. Entre todos tenemos que conseguir que la regularidad sea algo normal. No podemos mirar para otro lado. Es una situación que nos lleve a encender las luces”, decía.
Monchi, que mantiene que que la defensa no tiene la culpa de todos los males, rubricaba su valoración apuntando que “todos tenemos que aportar más desde nuestras distintas parcelas. La dirección deportiva, técnicos, jugadores… El problema no es el mal de uno solo”.