La cúpula del Partido Comunista chino (PCCh) mantuvo este jueves una reunión presidida por el secretario general de la formación y presidente del país, Xi Jinping, tras la cual se comprometió a "estabilizar el sector inmobiliario para que no siga decayendo" y "promover la economía privada".
"Es necesario ayudar a las empresas a superar las dificultades. Promoveremos la economía privada y crearemos un buen ambiente para el desarrollo de la economía no pública", señala la agencia Xinhua sobre la reunión, en la que el partido se comprometió también a "garantizar los gastos fiscales necesarios" y "mejorar el sentido de responsabilidad y urgencia para hacer un buen trabajo económico".
Las autoridades chinas anunciaron el martes un paquete de estímulos con medidas de apoyo al sector financiero, al inmobiliario o al mercado de valores para reavivar la recuperación de la segunda economía mundial ante los temores sobre si podrá cumplir con su objetivo de crecimiento de este año.
El Politburó de la formación, compuesto por 24 miembros, destaca que el país se encuentra en un momento en el que debe "superar dificultades", pero para ello debe "responder con calma" y "centrarse en la profundización de la reforma y la apertura, ampliar la demanda interna y optimizar la estructura económica", entre otros.
"China sigue teniendo un mercado amplio, una fuerte resiliencia económica y un gran potencial. Al mismo tiempo, han surgido problemas nuevos en el funcionamiento económico actual", reconoce la formación.
Para afrontarlos, el PCCh pide "serenidad" pero también "tomar la iniciativa e implementar con eficacia las políticas existentes".
"Debemos esforzarnos por completar los objetivos y tareas del desarrollo económico y social de este año", indica el comunicado. Los datos económicos de agosto en China fueron peores de lo esperado y Xi pidió hace unas semanas elevar los esfuerzos para conseguir el objetivo de crecimiento económico para este año, de en torno a un 5 %.
Así, el PCCh asegura que "garantizará los gastos fiscales necesarios" y que emitirá bonos especiales del tesoro a largo plazo y bonos especiales de los gobiernos locales.
"Debemos reducir el coeficiente de reserva de depósitos e implementar una fuerte reducción de las tasas de interés. Debemos promover el mercado inmobiliario para detener su caída y estabilizarlo", señala la formación.
También resalta que se debe "aumentar y mejorar la calidad de la construcción de viviendas" para "responder a las preocupaciones de la gente", con "ajustes a la política de restricción de la compra" o "reducciones a la tasa de interés de los préstamos hipotecarios existentes".
Atraer inversión y promover el consumo
Por otra parte, el PCCH aboga por "apoyar la fusión y reorganización de las empresas que cotizan en bolsa", al tiempo que enfatiza la necesidad de "impulsar firmemente la reforma de fondos públicos y estudiar e introducir políticas y medidas para proteger a los pequeños y medianos inversores".
"Debemos ayudar a las empresas a superar las dificultades, con leyes que ayuden a promover la economía privada y a crear un buen ambiente para el desarrollo de la economía no pública", indica la formación, que también apuesta por promover el consumo aumentando los ingresos de los grupos de ingresos medios y bajos.
También pide "intensificar los esfuerzos para atraer y estabilizar la inversión, acelerar la promoción y la implementación de medidas de reforma como el acceso de la inversión extranjera en el sector manufacturero, y optimizar aún más el entorno empresarial".
En ese sentido, la formación pide a militantes y cuadros que tengan "el valor de asumir la responsabilidad y atreverse a innovar" para "superar las dificultades".
Al margen, el PCCh muestra su compromiso por "apoyar y normalizar el desarrollo de las industrias de cuidado de ancianos y de niños", así como "acelerar la mejora del sistema de políticas para apoyar la fertilidad".
La baja demanda nacional e internacional, unida a riesgos de deflación, estímulos insuficientes, una crisis inmobiliaria que no ha tocado fondo o una falta de confianza en el seno de los consumidores y el sector privado son algunas de las causas que esgrimen los analistas para explicar la actual desaceleración de la segunda mayor economía mundial.