La secretaria de Organización del PSOE-A, Susana Díaz, que llegó a reconocer que la decisión de Velasco le había cogido "totalmente" de sorpresa, era la encargada hace unos minutos de comunicar que la dimisión de Rafael Velasco como vicesecretario general del partido era "irrevocable" a pesar de los intentos del secretario José Antonio Griñán para que siguiera en el cargo.
"La decisión era del señor Velasco y no del señor Griñán", apuntaba Díaz asegurando que Velasco ha decidido dedicarse de lleno a su familia y que "no soportaba ni un minuto más la cacería" contra su familia a raíz de las informaciones sobre las subvenciones de la Junta de Andalucía que habría recibido la empresa de su esposa, algo más de 700.000 euros, para dar cursos de formación.
Según Díaz, Velasco ha tomado esta decisión personal el mismo día que los servicios jurídicos del Parlamento han emitido un dictamen en el que se asegura que el ya ex diputado autonómico no habría incurrido en "ninguna incompatibilidad ni irregularidad" por estas denuncias, ya que la Ley se refiere sólo a las actividades del diputado y no de su esposa. "Ni administra ni es propietario de los bienes de su esposa, es una conquista de estos tiempos, el hombre no controla los bienes de su mujer", ilustraba.
La decisión de Velasco, según Díaz, "no pone en tela de juicio la dignidad ni la honradez" del ya ex vicesecretario general del partido, que en un "gesto de generosidad" ha preferido poner "en valor" el bienestar de su familia a la política, ante al "campaña de difamación, injurias y calumnias" que, llegó a decir, ha puesto en riesgo incluso la salud de sus familiares.
Tras asegurar que el PSOE-A respeta la decisión y se siente orgulloso "como persona, político y compañero" de Velasco, Susana Díaz apuntó que los 42 hombres y mujeres que componen la dirección del partido "se dejarán la piel" por el proyecto socialista y asumirán como "órgano colegiado" las funciones de la Secretaría General.
Según Díaz, esta dimisión no crea una "crisis" dentro del partido y no quiso aclarar si desaparecerá o no la Vicesecretaría. "Eso ya se verá", apuntó ante la insistencia de la prensa pero reiterando una y otra vez que la función del vicesecretario -que representa al secretario general cuando está ausente- la asumirá un miembro de la dirección dependiendo del acto o la negociación que se esté llevando a cabo. "Sabemos lo que tenemos que hacer y no hay tiempo para otra cosa, porque no hay crisis, tenemos claras nuestras tareas".
También negó que se ponga en tela de juicio tanto la fortaleza de la dirección actual como el peso político de Velasco, habida cuenta de que otros dirigentes socialistas también han sufrido campañas similares. "Hay que ponerse en la piel del señor Velasco", argumentaba Díaz, que admitía que el partido tendrá que hacer un esfuerzo por dar a conocer las nuevas caras del partido y hacer efectivo el mandato de Griñán de ser una "polifonía de voces"
Sobre la querella anunciada por el portavoz parlamentario socialista, Mario Jiménez, Susana Díaz afirmó que será el propio Velasco el que decida qué medidas jurídicas adoptará, aunque quiso dejar claro que "no es él que que tiene que dar explicaciones, si no los que quieren encanallar y criminalizar la vida política". "Pero hoy no toca hablar del PP, del PP ya hablaremos", decía Díaz
El vicesecretario general del PSOE-A, Rafael Velasco, presentó ayer por la tarde su dimisión como diputado autonómico "por motivos personales" tras las informaciones sobre las subvenciones recibidas por la empresa de su esposa, según informaba el partido en un comunicado.
En la nota, Velasco acusa al PP de "orquestar una cacería política contra él y su familia", después de que se conociera que la empresa de su mujer habría recibido subvenciones para cursos de formación para el empleo por parte de la Junta de Andalucía.
Fuentes socialistas aseguraban a Efe que Velasco presentó también ayer su dimisión como vicesecretario general del PSOE-A, pero no le fue aceptada por el secretario general del partido y presidente andaluz, José Antonio Griñán, "aunque él ha insistido en reiteradas ocasiones".
Según las mismas fuentes, Velasco "se siente muy afectado" por ese asunto y ha dicho que "no aguanta el linchamiento moral" al que considera que está siendo sometida su familia.
El comunicado del PSOE afirma que Velasco ha decidido presentar su dimisión como diputado autonómico "debido a lo que entiende como una campaña de difamación, de injurias y de calumnias personales y familiares".
"Visto como se está resintiendo su vida familiar, y dado el estado en el que se encuentra su esposa, que está esperando su segundo hijo, le ha hecho tomar la decisión de dejar su acta de diputado para dedicarle un mayor tiempo a su familia", señala la nota.
Velasco enmarca su dimisión en la "cacería política orquestada por el PP contra él y su familia, en especial contra su esposa, que desarrolla su actividad profesional como empresaria en Córdoba" y ha querido "dejar constancia de la trayectoria empresarial y profesional de su cónyuge, que ha tildado de intachable y que está sujeta a todos los controles de legalidad", indica el comunicado.
El comunicado señala que la Comisión Ejecutiva Regional del PSOE de Andalucía manifiesta "su total apoyo" a Rafael Velasco y anuncia que emprenderá las acciones legales que estime pertinentes para depurar las responsabilidades que se determinen del daño moral ocasionado.
Velasco negó la semana pasada que existan irregularidades o incompatibilidad alguna en las subvenciones que recibe la empresa de su mujer, Aula 5, en Córdoba, tras las informaciones publicadas por el diario El Mundo.
Según esas informaciones, la empresa habría recibido 730.000 euros en ayudas, de las cuales la Junta ha pagado el 90 por ciento de los cursos de formación para el empleo que ofrece el centro de estudios Aula 5.
"Mi mujer no ha incurrido en ninguna irregularidad", dijo entonces Velasco.