Hoy y mañana se presentan como claves para el chequeo médico
Los ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE), que se reunirán hoy y mañana en Luxemburgo, continuarán las negociaciones para reformar la Política Agrícola Común (PAC), con el fin de propiciar un acuerdo para el mes de noviembre.
El Consejo de Agricultura y Pesca de la UE seguirá las discusiones sobre la revisión o el llamado chequeo médico de la PAC, aunque en esta ocasión serán sobre todo contactos bilaterales para acercar posturas ya que, según varias fuentes, los países están aún muy distantes y parece complicado un pacto. Asiste la ministra española del Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, acompañada por el consejero del ramo de Cantabria, Jesús Oria, quien este semestre representa a las comunidades autónomas en el Consejo de la UE.
Los ministros comenzarán la reunión con los asuntos de pesca y hasta la tarde no empezarán a tratar la revisión de la PAC; está previsto que se celebren sesiones trilaterales durante los dos días entre cada país, la comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel, y la presidencia francesa de turno de la UE. Mañana, el Consejo hará un balance breve de estos contactos y la presidencia expondrá cómo van a continuar desde ese momento hasta la recta final de la negociación, que se producirá los días 18 y 19 de noviembre. La PAC absorbe la mitad del presupuesto comunitario, 55.800 millones de euros al año (España es el segundo receptor, con más de 6.900 millones para agricultura y pesca).
Desde septiembre, se intensificaron los trabajos sobre la reforma y se han celebrado “grupos de alto nivel” en los que ha quedado de manifiesto que hay “pocos avances” porque los países no se mueven de sus posiciones, según fuentes comunitarias.
Según la presidencia francesa de la UE los asuntos abiertos son: el futuro de las cuotas lecheras, las medidas de intervención en el mercado y la modulación o recorte de ayudas agrícolas para reforzar el desarrollo rural. También hay dificultad en la idea de la Comisión Europea (CE) de convertir el máximo posible de subvenciones en lo que se llama pago único, que se da por hectárea o explotación y está desligado de la cantidad producida por el agricultor o ganadero; un punto de conflicto es la fecha de aplicación de esta medida para algunos sectores.