El ciclo combinado celebra cinco años sin bajas por accidente

La central de ciclo combinado de Arcos acogió una jornada interna sobre prevención de riesgos laborales, en la que participaron los trabajadores de la propia central y los técnicos en esta materia de las empresas contratistas.
Como ponentes tomaron parte, además de los responsables de la compañía, el subdirector General de Seguridad y Salud Laboral de la Junta de Andalucía, Sebastián Chacón, así como el director del Instituto Andaluz de Prevención de Riesgos Laborales, Antonio Márquez, que clausuró la jornada.
La central de Arcos está en funcionamiento desde febrero de 2005 fecha en la que entraron en operación comercial los Grupos de Generación 1 y 2 y posteriormente, en marzo de 2006, lo hizo el Grupo 3. En este tiempo, se llevan acumuladas 78.000 horas de funcionamiento y más de 22.300 GWh de producción, así como más de 530.000 horas trabajadas sin accidentes con baja.
Recientemente, los trabajadores del ciclo combinado de Arcos celebraron los cinco años de funcionamiento de la planta sin que se hayan producido accidentes con baja. “Este hito se ha conseguido gracias a la implicación de la plantilla y de los responsables de la instalación que han puesto el máximo esfuerzo en el cumplimiento tanto de la normativa en materia de prevención de riesgos laborales como en la formación en este campo”, según fuentes de la compañía.
El ciclo combinado de Arcos tiene integrada la prevención de riesgos laborales en la gestión diaria de sus actividades, labor que se desarrolla en varias líneas de actuación “que van más allá de lo que estrictamente pide la normativa aplicable”.
En la planificación de los trabajos se asegura una correcta identificación de los riesgos asociados, prestando especial interés en la colaboración con las empresas contratistas, bien mediante reuniones diarias de coordinación con las empresas que van a realizar los trabajos planificados bien aportándoles la información sobre los procedimientos y normas seguras de actuación.
En la ejecución de los trabajos se supervisa no sólo la calidad de los mismos, sino también el hecho de que se tomen las medidas de seguridad individuales y colectivas necesarias. En esta línea, se encuentra implantado el proceso Supervisión de Actividades en Planta (Sapla), por el cual todos los titulados de la instalación realizan supervisiones de trabajos propios y externos y de diferente tipología. Durante el año 2009 se han supervisado 184 trabajos de mantenimiento.
Se cuenta, además, con la participación del personal en la mejora de la seguridad de las instalaciones y de las medidas de protección en la ejecución de trabajos. Para ello se dispone de una sistemática de notificación de mejoras en materia de prevención de riesgos laborales, denominados Partes N, que obliga a la empresa a analizarlos uno a uno y a implantarlos si esa propuesta mejora la seguridad de los trabajos e instalaciones. En este sentido, desde el inicio de la operación comercial a primeros del año 2005, se han notificado 941 partes N, con una resolución a día de hoy del 92 por ciento y una inversión de aproximadamente un millón de euros.
Todo esto se apoya y complementa con una decidida apuesta por la formación del personal en materia de seguridad y prevención. En los últimos cinco años se han impartido unas 5.400 horas de formación, lo que supone una media de 17,5 horas por empleado y año. Destacan en este capítulo la diversidad de iniciativas formativas implantadas por la compañía como cursos, charlas semanales, formación on-line, participación en auditorías internas, revisión de procedimientos de trabajo, difusión de incidentes ocurridos en otras instalaciones o participación en premios de seguridad.
Por otro lado, el hecho de tener implantado y certificado un sistema de gestión de la prevención de riesgos laborales, según la norma internacional Ohsas 18001, permite sistematizar y mantener estas actuaciones además de asegurar, por medio de auditorías externas, que se cumplen los requisitos normativos en esta materia.
La compañía fue galardonada en 2007 en la primera edición de los Premios a la Prevención de Riesgos Laborales convocados por la Junta de Andalucía, en la modalidad de Buenas prácticas preventivas, que reconocía la labor en esta materia llevada a cabo tanto durante la fase de construcción de esta central de ciclo combinado de Arcos como en la de explotación.