La alcaldesa de Arcos, Josefa Caro, ha presentado esta semana los primeros bocetos del que será el primer monumento a la figura de Curro Calderón, el famoso y apreciado jinete arcense fallecido este año de forma inesperada.
El que fuese campeón nacional e internacional de doma vaquera contará con un monumento a la altura de la glorieta de la travesía urbana que regula la circulación dirección a El Jadramil, lugar donde tenía su centro hípico Las Nieves y su residencia familiar.
Se trata de una obra en bronce diseñada por el escultor jerezano Nicolás Domecq Ibarra, quien realizó el monumento a Alvaro Domecq en su ciudad natal. La obra admite a Curro Calderón sobre un bello caballo que toma uno de los pasos característicos de la doma vaquera, el arte que tanto dominó en vida.
El monumento en sí tiene una altura de 2,8 metros, a los habría que sumar casi otro tanto de peana, con lo que su altura sobre la citada rotonda sería considerable y fácilmente admirable desde los alrededores.
El artista, un perfeccionista de las formas clásicas, se inspira en un estilo muy naturalista e infringe al caballo una gran sensación de movilidad y manierismo, como explicó la alcaldesa durante la presentación del trabajo. A ello, añadió que Nicolás Domecq intenta “expresar la elegancia con líneas muy vigorosas y planos muy precisos. Está concebida para ser vista aisladamente, encima de una peana, como una escultura efectista y para llamar la atención de quienes la contemplen”.
El trabajo tiene un presupuesto de 117.160 euros, que será sufragado por el Ayuntamiento y la aportación de empresarios y personalidades del mundo del caballo, amén de otras instituciones, que ya contribuyen con fondos para materializar este proyecto que no viene más que a prestar justicia a la memoria de un hombre que consagró su vida al bello y noble arte de la monta ecuestre.
Según Josefa Caro, con este monumento se pretende de algún modo tributar además la importancia que tiene el mundo del caballo en Arcos y a otras personas que han destacado en este campo, caso de Curro Calderón (padre) o los hermanos Rodríguez, entre otros. Además, para la regidora se trata de un reconocimiento hacia otra de las señas de identidad “que prestigia” a Arcos de la Frontera.
la familia sigue el trabajo
La familia Curro Calderón está al corriente de cada paso que se ha dado y se da para la construcción del monumento. Su esposa y su hijo mayor participaron en la reunión en la que el artista Nicolás Domecq presentó los bocetos de su trabajo. Según la alcaldesa arcense, quedaron encantados con la expresividad del monumento dedicado al maestro.
