La Consejería de Cultura, a través de la Dirección General de Memoria Democrática, ha encargado al investigador Óscar Rodríguez Berreira un informe que permita conocer las posibilidades de hallar y recuperar, en su caso, los restos de los represaliados que, según los indicios recabados hasta el momento, habrían sido exhumados del cementerio de San José de la capital antes de amortizar las fosas.
Según ha explicado Rodríguez, la investigación sobre el paradero de los restos óseos tiene como fin dar respuesta a la petición efectuada por los familiares de Martín Márquez, último alcalde republicano de Cuevas del Almanzora (Almería), quienes motivaron con su petición una serie de exhumaciones en el camposanto capitalino a final del pasado año.
No obstante, las catas arqueológicas practicadas en las zonas determinadas por los expertos revelaron la ausencia de restos pertenecientes a víctimas de la Guerra Civil o la represión, ya que los huesos hallados en su lugar provenían de una serie de entierros de caridad realizados en años posteriores.
Con esto, la fosa de Martín Márquez, situada a última instancia bajo una construcción de nichos, no llegó a ser explorada ante la dificultad de la intervención y a que, durante la excavación, un testimonio corroboró que la fosa habría sido amortizada.
Ante esta situación y la del "desmantelamiento" de las fosas apuntada en el informe preliminar del equipo encargado de la actuación, Rodríguez inició en agosto su investigación a fin de documentar el proceso seguido para hallar los cuerpos de las víctimas, para lo que se ha desplazado a diferentes archivos y registros, y ha mantenido entrevistas personales con agentes implicados en la búsqueda.
En esta tarea, ha señalado la ausencia en los archivos de los libros de enterramientos y exhumaciones de las décadas anteriores al periodo democrático en los que habría quedado constancia de la extracción de los restos cadavéricos y su posterior traslado; cuestión sobre la que ya se habían pronunciado algunos testimonios y que está recogida en el mapa de fosas de la Junta de Andalucía.
En cualquier caso, será con este informe en el que se detallen las actuaciones realizadas y el contexto en el que se desenvuelven, con el que la Junta de Andalucía deberá decidir si procede a continuar con los trabajos o, en su caso, abundar en la búsqueda de los cadáveres desaparecidos, así como si decide emprender acciones de otro tipo o, en su caso, compensar de algún modo a las familias de las víctimas que no han podido recuperar los restos de sus allegados.