La Fiscalía va a solicitar penas que suman siete años de prisión para dos acusados de estafar casi 22.500 euros a una empresa con sede en Villafranca (Córdoba) para la que trabajaba uno de ellos, quien, mediante la falsificación de facturas, cobraba de menos a la mercantil de la que era titular el otro procesado.
El Ministerio Público imputa al delegado en Almería de la empresa cordobesa, F.R.F., la presunto autoría de sendos delitos continuados de estada y falsificación de documentos por los que pide cinco años de cárcel mientras que a su cómplice en la trama para incrementar su patrimonio, R.S.C., le acusa de un presunto delito de continuado de estafa por el que interesa 24 meses de prisión
El escrito, al que tuvo acceso Europa Press, relata que F.R.F. ostentó la dirección y representación legal de la delegación de la mercantil de Córdoba, ubicada en el Polígono Industrial San Salvador de Benahadux y dedicada a la venta y comercialización de productos siderometalúrgicos, entre mayo de 2008 y enero de 2009.
En ese tiempo, con "ánimo de ver incrementado su patrimonio y en unidad de acción y propósito" con R.S.C., quien era responsable de otra mercantil, "simularon diversos albaranes y facturas de suministro de material", en las que hacían constar que el material que "salía del almacén de la entidad perjudicada se entregaba a empresas dedicadas al sector de la construcción, conocidos y solventes clientes de la empresa a la que representaba".
El fiscal remarca que esto "no se correspondía con la realidad" ya que la recepción de los productos se llevaba a cabo por la mercantil de la que era representante legal R.S.C., que no abonaba el importe íntegro del material que le era facilitado.
Así, el Ministerio Público calcula que la empresa perjudicada dejó de ingresar en sus cuentas por el materia que suministraba un total de 22.448.38 euros, cantidad que interesa devuelvan de manera conjunta y solidaria. La vista oral se celebrará los días 22 y 23 de octubre en la Audiencia Provincial de Almería.