El líder del PP, Pablo Casado, considera que "no tiene sentido" que el estado de alarma se prolongue "más allá de 60 días", ya que, a su entender, la desescalada "ya no necesita" este instrumento "excepcional" que limita derechos y libertades. Dicho esto, ha exigido al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, que desvincule del estado de alarma el pago de la prestación de los ERTES y la liquidez a pymes y autónomos porque, a su juicio, es un "chantaje" e "inmoral".
"En los términos en que la conocemos no podemos apoyar la prórroga al estado de alarma", ha declarado Casado en una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press, en la que ha insistido en que el Gobierno dispone de legislación básica para afrontar la actual situación derivada de la pandemia como la Ley de Salud Pública, la Ley de Protección Civil o la Ley de Seguridad Nacional.
Casado ha explicado que el estado de alarma ha sido necesario para evitar "el colapso" de las UCI pero ha añadido que, una vez que el propio Sánchez dice que se puede salir a "tomar el vermut", hay que adaptar la normativa legal a la situación.
"NO TIENE SENTIDO MÁS DE 60 DÍAS"
El presidente del PP ha asegurado que "no tiene sentido" que el estado de alarma vaya "más allá de 60 días" porque en la Constitución su "homólogo más grave", que es el estado de excepción, tiene una limitación de dos meses.
En este punto, ha recordado que el PP dijo "desde el primer día" que el estado de alarma aprobado por el Gobierno "desbordaba el ámbito constitucional", dado que en su regulación en la Carta Magna "ni siquiera se prevé la limitación de derechos fundamentales como la circulación, la asociación o la manifestación".
Por todo ello, ha reiterado que el PP considera que el estado de alarma prorrogado a partir de esta semana "no tiene ningún sentido". "El PP, a día de hoy, con la información que tenemos, considera que no podemos apoyar la prórroga del estado de alarma", ha dicho, si bien no ha aclarado si eso significa que su partido optará por la abstención.
EL "CHANTAJE" DE SÁNCHEZ CON LOS ERTE
Casado ha afirmado que las declaraciones de Sánchez el sábado son un "chantaje a cuatro millones de españoles que están sin trabajar" al vincular la prestación de los ERTE y la liquidez a las empresas al estado de alarma.
Según ha dicho, esto es algo que el PP "no puede tolerar" y "no hay nada de lo que hablar" con el Ejecutivo hasta que no deje claro en el Consejo de Ministros de este martes que eso se hará por otros cauces y quedará desvinculado del estado de alarma.
"Le estamos diciendo que no vincule el estado de alarma a las ayudas a millones de españoles que las necesitan porque sabe que no tiene por qué hacerlo", ha enfatizado, para añadir que una vez que el Gobierno haya dejado de tomar a los españoles "como rehenes" podrán ver qué tipo de medida legal necesita para la desescalada.
"UN INSULTO" NO TENER PLAN B
Casado ha reiterado que si el Gobierno ya sostiene que se está caminando hacia la "nueva normalidad" no parece "lógico utilizar este instrumento "excepcional". Además, ha calificado de "un insulto" a los españoles que Sánchez diga que no tiene "plan b".
El presidente de los 'populares' ha recriminado una vez más a Sánchez que no haya "más coordinación" del Gobierno con las comunidades y los ayuntamientos, dado que hay que contar con ellos para llevar "a buen término" la desescalada en sus territorios.
Casado ha afirmado que esta posición se la trasladará esta semana cuando le llame por teléfono antes de la votación de este miércoles en el Pleno del Congreso de la prórroga del estado de alarma. "Así se la haré saber cuando tenga a bien llamarme, aunque sea para comentar la prensa, como hace siempre", ha declarado,
Tras recalcar que su partido no ha podido ser "más generoso", ha afirmado que si Sánchez quiere plantear "líneas de negociación lo que tiene que hacer es informar" al PP y contar qué les dicen sus "supuestos expertos" y después llegar a "un punto común" con oposición, autonomías y ayuntamientos. "Esta unilateralidad para ser tan ineficaz y tan incompetente no puede buscar complicidad en la oposición", ha avisado.
"LOS ESTRAGOS DEL PARÓN ECONÓMICO"
Además, ha dicho que debe haber ya una recuperación de la economía porque si no se abre ya los "estragos de este parón económico va a ser muy grave". "La improvisación es letal", ha aseverado, para denunciar que el Gobierno no detallase hasta este domingo a última hora las condiciones en las que los comerciantes podían abrir hoy sus tiendas.
Casado ha afirmado que ya hay en España 21 millones de españoles que dependen sus ingresos del Estado y "solo 14 millones están activos y contribuyendo a las arcas públicas". En su opinión, esta situación es "insostenible". "O abrimos la economía o el Estado del Bienestar, las pensiones, la sanidad y la educación pública no van a ser sostenibles", ha avisado.
Al ser preguntado si el PP levantaría hoy todas las restricciones si gobernase, ha indicado que él tendría un "mapa serológico de contagios, habría techo test masivos desde la primera semana y no estarían llevando a España a la ruina económica y a la mayor cifra de contagios de todo el mundo".
A su entender, hay que proporcionar medidas de protección y hacer los máximos test posibles para "abrir la economía lo más posible". "Hace falta previsión, competencia, eficacia y respeto", ha dicho, para agregar que el presidente del Gobierno le ha perdido el respeto a los españoles.
"DEGRADACIÓN DEL SISTEMA DEMOCRÁTICO"
Así, ha recalcado en la actual situación que afronta España hace falta "previsión, competencia y eficacia", así como "certidumbre" y un Gobierno que "respete a los españoles". "La eficacia en política ha brillado por su ausencia con este Gobierno y pedimos que abandone la soberbia y el intentar culpabilidad a la oposición y a los propios españoles de sus errores", ha demandado.
Finalmente, ha acusado a Sánchez de haber utilizado el estado de alarma para "modificar el CNI, contrarreformar la ley educativa, impulsar la ley de la eutanasia, modificar los plazos de instrucción judicial y ya de paso modificar una ley orgánica a través de orden ministerial". A su entender, todo esto es una "degradación del sistema democrático que no se puede permitir".