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Sevilla

Familia del niño fallecido en montería pide ampliar la responsabilidad

Fallecido por un disparo en una montería de caza celebrada el pasado mes de enero en la finca 'La Lapa' del municipio sevillano de Guillena

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  • Juzgados de Sevilla. -

La representación legal de la familia del menor de edad fallecido por un disparo en una montería de caza celebrada el pasado mes de enero en la finca 'La Lapa' del municipio sevillano de Guillena ha solicitado al juez del Juzgado de Instrucción número 16, Juan Gutiérrez, que amplíe la responsabilidad durante el desarrollo de la investigación al organizador de la montería, al postor --el encargado de asignar los puestos de caza--, y al titular del puesto de caza en el que se encontraba el tirador.

La letrada de la familia, Rosario Serrano, ha señalado a Europa Press que ante "la gravedad del hecho, que es la muerte de un niño de cuatro años" que ha sido generada "por una concatenación de errores graves", unido a que varios testigos "han confirmado que el pequeño siempre estuvo correctamente situado", cabe pedir la ampliación de la responsabilidad al organizador de la montería, al postor y al titular de puesto de caza.

Con respecto a esta causa, este viernes se ha celebrado una nueva sesión en el Juzgado de Instrucción número 16, en el que han declarado otros cinco testigos presenciales entre los que se encontraba el guarda del coto quien en su testificación ha asegurado que el pequeño "no se movió de su sitio en todo momento" en el puesto de caza '2' y que el tirador, que acompañaba al titular del puesto de caza '1' --el único que estaba autorizado a disparar en el puesto-, "disparó en sentido contrario al autorizado".

En la anterior sesión de instrucción, celebrada el pasado día 15, declararon los rehaleros quienes aseguraron que el investigado se encontraba fuera de su puesto "a una distancia de 15 o 30 metros" y, pese a las advertencias de estos rehaleros, "éste hizo caso omiso", así como que siempre vieron al menor "correctamente" sentado en el puesto de caza '2' en el que estaba junto a su padre y su abuelo.

Esa misma jornada, también declararon el organizador de la montería y el postor quienes aseguraron que las medidas de seguridad de la montería eran las "adecuadas" y que no había obligación a informar de las normas de la montería al investigado porque era un mero acompañante y no un titular de un puesto de caza.

"EL NIÑO NO SE MOVIÓ"

El pasado día 13 testificaron dos participantes en la montería que se encontraban en el puesto de caza '3', donde tenían visible el puesto '2' en el que se encontraba el menor fallecido, y aseguraron que el pequeño estaba "quieto en un banquito" cuando recibió el disparo mortal y que vieron como el padre corrió a auxiliarle.

De otra parte, ese mismo día testificó el titular del puesto de caza '1', donde se encontraba el investigado. El testigo indicó que su acompañante, que no dispone de licencia de armas, se salió de la zona habilitada para disparar y que disparó "en dirección contraria" a la permitida.

INFORME DE LA GUARDIA CIVIL

El informe de inspección en el paraje Los Siete Cerrillos de la citada finca que realizó la Guardia Civil, al que tuvo acceso Europa Press, señala que la zona desde donde se produjo el disparo mortal, cuyo autor fue L.A.G., se encuentra a 25 metros de distancia respecto a la localización del puesto número uno en el que se encontraba el acusado, distancia que rechazaba su defensa.

Además, indica que la distancia entre la zona desde donde se registró el disparo mortal y el puesto número dos, en el que se encontraba el menor fallecido junto a su padre y otros familiares, era de 124 metros. En este punto, hay que resaltar que la defensa el acusado afirma que el arma usada por su representado no supera los 30-35 metros de distancia, cuestión que tendrá que analizar los agentes actuantes, pues se está a la espera del informe sobre las armas utilizadas y la balística, que será quien confirme el alcance de la de la escopeta del presunto autor.

El Instituto Armado, en sus conclusiones, apunta que el 19 de enero se llevó a cabo una montería en la finca La Lapa de Guillena, donde se establecieron, según testimonios, cuatro armadas, reseñadas con el nombre de 'Poste', 'La Linde', 'El Carril' y 'La Gergal', cada una de ellas compuesta en un principio por cinco puestos de caza o tiro.

En la armada denominada 'Poste', que estaba compuesta en un principio por cinco puestos de caza, en el número uno estaría, "al menos", el acusado y G.S.O. En un momento dado, según la Guardia Civil, L.A.G. "se salió del puesto de caza", subió hasta la zona más alta --a unos 25 metros de distancia de su puesto--, en la zona del cruce del camino.

"En un momento dado disparó en dirección contraria a la que tenía indicado dispara si hubiera estado en su puesto, realizando el disparo hacia el lugar donde se encontraban los puestos número dos y tres", explica el Equipo de Policía Judicial de La Rinconada.

"Disparó en dirección al puesto de caza número dos, lo que directamente ocasionó que uno de los integrantes del mismo --el menor-- resultara fallecido por el impacto de la munición utilizada". El niño acompañaba a su padre y demás familiares como observador en dicho puesto, en el que el tirador era su abuelo.

En este sentido, los agentes actuantes señalan que, de lo observado en el puesto número dos, se desprende que el menor "estaría colocado" en dicho puesto "de forma correcta", así como el disparo mortal lo llevó a cabo el acusado, que "debía ocupar el puesto número uno y que se había colocado fuera del mismo".

Igualmente, "se ha podido comprobar que los puestos dos, tres y cuatro no estaban montados de forma correcta ya que entre ellos tendría que haber una distancia mínima de 150 metros" y no las distancias eran inferiores. Ésta es la distancia reglamentaria cuando no existen obstáculos naturales entre los puesto, según la vigente Ley de Caza de Andalucía.

Entre los puestos '1' --el del autor del disparo-- y '2' --donde se encontraba el niño--, había menos de 150 metros pero sí existía una barrera natural --un cerro o loma--, que impedía que --siempre que no salieras del puesto-- llegaran los disparos de un puesto a otro.

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