El Sistema de Alertas por Tsunami del Pacífico levantó hoy la alerta por riesgo de ola gigante emitida tras el terremoto de magnitud 7,5 en el este de Nueva Caledonia, un territorio francés en el Pacífico Sur, sin que se hayan registrado daños importantes.
"En base a todos los datos disponibles, la amenaza de tsunami por este terremoto ha pasado", indicó el organismo estadodunidense en su último comunicado.
El servicio, cuya alerta incluía Nueva Caledonia, Vanuatu y Fiyi, señaló que podría haber fluctuaciones de 30 centímetros sobre el nivel normal de la marea durante las próximas horas en algunos puntos.
Las autoridades de Nueva Caledonia habían ordenado la "inmediata evacuación" de la población en el litoral tras la sacudida localizada a solo 10 kilómetros bajo el lecho marino y a 168 kilómetros al este de Tadine, en la isla de Maré, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que vigila la actividad sísmica mundial.
La Oficina del Alto Comisionado de Francia en Nueva Caledonia llamó a la población a alejarse de la costa y reagruparse en refugios con medicamentos, agua y otros artículos esenciales.
Las autoridades de protección civil de Nueva Caledonia indicaron que el seísmo generó olas de dos metros en la Isla de los Pinos, pero provocaron daños menores sin causar víctimas, según la prensa local.
El terremoto fue precedido minutos antes por otra sacudida en la misma zona de magnitud 6 y seguido por varias réplicas, incluida una de magnitud 6,6.
El Sistema de Alertas por Tsunami elevó la magnitud de este terremoto a 7 y emitió una nota en la que descartó que hubiera un nuevo riesgo de tsunami.
Nueva Caledonia, con 270.000 habitantes, se encuentra cerca del llamado Anillo de Fuego del Pacífico y de los volcanes submarinos de la Cuenca de Lau, por lo que registra habitualmente sacudidas de origen sísmico.