La historia se repite cada vez que llueve. Llueve sobre mojado sin que se ponga una solución a unas instalaciones que necesitan de unas mejoras y de un mantenimiento ausente, por más que desde hace años se repita la misma estampa y por más que unos y otros conozcan su realidad sin que se arregle.
Tal y como hemos venido denunciando semanas atrás en el estado calamitoso de la gran mayoría de las instalaciones deportivas de la ciudad y haciéndonos eco de las quejas de los usuarios y deportistas que cada día acuden a éstas, el Pabellón de Jóvenes Portuenses retrata -tal y como muestra la foto- su peor cara en la cruda realidad con la que deben enfrentarse los que pretenden hacer deporte.
Los improvisados cubos recogen las aguas caídas de la lluvia por las goteras que dejan caer sobre un techo en malas condiciones y sin atención desde hace años. “No hace falta que llueva mucho, con tal que lo haga ya hay charcos sobre la pista. Esto es una vergüenza. Me río de que se está haciendo una buena labor en recuperar el deporte portuense; solo hay que venir aquí cuando llueve”. Esta es solo una muestra explícita de un usuario que acude cada semana al pabellón.
“Es lo que nos encontramos cada vez que llueve; cubos y más cubos. Otro parche más”. Esta imagen se une a las demandas de otra de las instalaciones como las de El Juncal, que a escasos metros del pabellón también reclama atención.
