Agentes de la Policía Nacional han detenido en el municipio de Telde (Gran Canaria) a una mujer de 23 años, sin antecedentes policiales, como presunta autora de los delitos de inducción a la prostitución y corrupción de menores.
La arrestada obligaba a las mujeres a ejercer la prostitución en sus locales, aprovechándose de su situación de vulnerabilidad, y una de ellas, menor de 17 años, era castigada incluso si no cumplía los horarios laborales.
Los hechos se desencadenaron tras una denuncia telefónica en la que se ponía en conocimiento de los funcionarios policiales la presencia de una menor que ejercía la prostitución en un club de alterne ubicado en Telde.
Así, se inició una investigación que permitió destapar dos casas de citas ubicadas en el barrio de El Calero y regentadas por una mujer de 23 años, quien obligaba a las mujeres que allí trabajaban a ejercer prácticas sexuales no deseadas valiéndose de la precaria situación económica por la que pasaban.
Los agentes pudieron constatar que en una de las casas había ejercido la prostitución una menor de 17 años, que además era castigada por la propietaria si no cumplía con todas sus exigencias, informa la Policía Nacional en una nota.
Por ello, la mujer fue detenida como presunta autora de los delitos de inducción a la prostitución y corrupción de menores.
La Autoridad Judicial ordenó llevar a cabo un registro en sendas casas en las que fueron además intervenidas diversas sustancias estupefacientes, que eran supuestamente distribuidas tanto entre clientes como entre las mujeres que trabajaban allí.
Instruido el correspondiente atestado policial, la detenida fue puesta a disposición de la Autoridad Judicial competente.
La investigación policial fue llevada a cabo por agentes de la Unidad Contra las Redes de Inmigración y Falsedades Documentales I de Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Las Palmas.
Esta operación se enmarca en el Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual, puesto en marcha en 2013, y que dio lugar a la creación de la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos, adscrita a la Comisaría General de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional.