Este triatleta rondeño es incombustible, disfruta cada día del deporte, es su vida. Compagina a la perfección el trabajo, la familia y el deporte.
Dice que entrena como el que más pero que su condición innata le ayuda. Nos cuenta que preparando la larga distancia ha llegado a hacer 150 kilómetros de “chapas”, en 4 horas y 47 minutos, y que ha nadado en la piscina municipal hasta 4.500 metros. Una capacidad mental única.
Pedro es digno de admiración por sus múltiples logros deportivos, pero los que le conocen destacan su humildad, su buen rollo con todos sus compañeros, no tiene nunca un mal gesto ni una mala cara con los suyos ni con los adversarios. Su familia deportiva alucina con él, lo tienen como un referente, sobre todo en lo humano y es que “Perico” engancha como su deporte preferido, el triatlón.
Pedro, ¿de dónde viene tu afición al triatlón?
Yo he hecho deporte siempre, lo que pasa es que cuando te dedicas a nadar es todo nadar y a los otros deportes como el atletismo o la bici igual, pero con el triatlón es más divertido combinas todos los deportes. Me metí en el triatlón porque el atletismo se convirtió un poco en rutina, toda la vida corriendo, llega un momento que las lesiones te van buscando con la edad, y yo había hecho bici por lo que fui alternando las dos modalidades para ir ahorrando cargas y desgastes, y ahí el duatlón, me gustaba era más entretenido, empecé a nadar para ir descargando también y de ahí pase al triatlón. Y este deporte cuando lo pruebas te engancha.
Correr he corrido toda la vida, desde siempre. He hecho toda la vida atletismo, con 18 años estuve compaginando karate con atletismo durante 8 o 9 años, llegue hasta cinturón negro pero el trabajo me impidió seguir y lo dejé de lado, empecé a correr para mantenerme, y un día en una urbana en Ronda hará 20 años debuté y quedé cuarto y el presidente del KM1 me ofreció entrar en él, había apenas 20 socios, me apunté y seguí hasta hoy.
Tenía muchas ganas de hacer triatlón, pero no me veía. Un día estando en la piscina nadando, Manuel García, triatleta rondeño, me dijo que en la Sierra de Cádiz se hacía un triatlón muy bonito y que si me preparaba en un año podía hacerlo, y el primer triatlón que hice fue este, en su tercera edición, el Titán de Zahara de la Sierra.
Me divertí lo hice en 6:40, he hecho todas las ediciones que ha habido hasta hoy que llevan trece, menos una que me perdí al ir al Desafío Doñana.
¿Cuál es tu segmento preferido?
El que más me gusta es la natación aunque es en el que voy peor. Nunca he dado clase, he aprendido solo, autodidacta, ahora mi progresión en 10 años ha sido muy buena en este segmento, hoy puedo bajar 10 minutos en el agua con respecto al primer Titán, y en el Ironman de Vitoria hice 1:07 en 4 kilómetros, muy buen tiempo, impensable hace cinco años.
Creo que es el segmento que más me gusta porque es el que voy más fresco, yo soy muy explosivo, cuando vas a la carrera a pie sufro mucho, me gustaría ir como si corriera únicamente pero ya llevas dos segmentos más en las piernas. Hay veces que me encuentro bien en el tramo de carrera y disfruto mucho, hace poco en un olímpico en Marbella hice el 2º mejor parcial de la general, un lujo a mi edad, con 600 personas. Con un 10.000, en 34 minutos, estaba bien preparado afinando para Vitoria.
Lo tuyo, perdóname, no parece normal a tus casi 52 años.
Creo que la genética influye, viene de mi madre, de los Carrasco, mi hermano está más preparado incluso que yo, y viene de la familia. Mi herrmano baja el Ironman de 10 horas.
¿Cuántas pruebas llevas?
Bueno, muchísimas. Pero todas cerca de Ronda. No soy de salir de viajes largos, suelo hacer maratones, medias, largas distancias de triatlón todo cerca de casa. Este año he estado en Vitoria porque me gustan los retos y tras acabar el año pasado el Titán más duro que había disputado, con 4.000 metros de agua, 120 de bici con puertos duros como El Boyar y Las Palomas y después 30 km de carrera llegando hasta Algodonales, una pasada; me dijeron que el Ironman era más duro, entonces pensé en apuntarme a uno.
El Ironman es más largo pero no más duro, el Titán es increíble.
Los 101 km de La Legión lo he hecho en todas las modalidades hasta el duatlón de 160 kilómetros que se metió un año. A pie, por equipo, el duatlón normal, el largo, todos.
No puedo decirte que tenga una carrera que me haya gustado más que otras. Todas me gustan. El Homenaje a la Guardia Civil en el primer año me gustó mucho, por la Sierra, los dos primeros años me encantaron, estaba muy bien de forma.
Cada vez se riza mas el rizo con la dificultad de las carreras, ¿no te parece?
Antes es que había por ejemplo de triatlón larga distancia uno cada tres meses en varios puntos de España, pero ahora cada semana puedes correr alguno con la demanda que hay, entonces ahora los organizadores buscan triatlones que se diferencien del resto y la forma de captar gente es esta, cambiando, menos en el Ironman pues lo dejan igual porque la gente va a hacer tiempo para entrar en Hawai que es lo mas top, y Ironman que es una marca deja el recorrido siempre igual. Lo ponen muy llano y siempre se apuntan más de 2.000 personas como mínimo.
¿Cómo te fue en Vitoria con una distancia Ironman?
Una maravilla, disfruté como un enano, cuando vi el trazado y vi lo llano que era acostumbrado a lo que suelo hacer, me dije, aquí, a marcar un puntito y a tirar. El agua en un lago maravilloso, nadé a gusto, en la bici rodé a media de 33 km por hora en 180 kilómetros, lo malo fue la carrera a pie, iba tocado y cuando llevaba los 21 kilómetros me tuve que bajar el ritmo para poder terminar, con todo hice un tiempo de 11 horas.
¿Tienes entrenador personal?
Siempre me he entrenado solo, menos para el Ironman que me ha entrenado Pedro Gavilán, y para el Titán, me causaban mucho respeto estas pruebas y por eso conté con su ayuda, queriendo ir con garantías, y los últimos seis meses de Vitoria me venía bien para planificar y centrarme solo en correr.
Después me hago mi planificación solo, conozco bien mi cuerpo y sé lo que le puedo dar.
¿Y cómo compaginas familia, trabajo y deporte?
Pues imagínate. Trabajo en Marbella y cada día me levanto a las 6:30 de la mañana, a las 9 estoy en el trabajo y llego a Ronda de vuelta a las 16:30, normalmente, recojo a las niñas y las llevo a las actividades que tengan y mientras entreno yo, o bien corro o nado, y vuelvo a recogerlas, hago encajes de bolillos, y gracias a mi mujer puedo seguir practicando este deporte. Además, los fines de semana, entreno de 7 de la mañana a 10 y a partir de ahí todo el tiempo en familia. Me gusta entrenar pero disfrutar de la familia mas.
Y el cuerpo, ¿cómo aguanta tanta marcha?
Prácticamente no me he lesionado nunca, me he sobrecargado, he ido al fisio, he parado un par de días, pero lesiones de alejarme de los entrenamientos muchos días, jamás. Ni un resfriado, ni dolores de cabeza, creo que es mi genética. Y eso que nunca paro, reconozco que soy de los que más entreno, empiezo con las carreras a pie, cuando terminan me voy al duatlón, después triatlón, no paro nunca. A los tres días de Vitoria volví a correr, no puedo parar. Las lesiones me respetan, creo que es la genética, nunca me he roto un hueso, ni esguince, no me hago una analítica desde hace 15 años.
¿Qué pruebas te faltan por terminar?
Quizás el Ultraman, es muy entretenido, se hace en Andalucía, es por pareja, se sale junto y se llega junto y me gustaría. El primer día 140 km de bici y 10 de natación, el 2º día 240 kilómetros de bici y el tercero una doble maratón de 84 kilómetros. Es asequible. Nadar los 10 kilómetros es fondo puro y en 12 horas haces sobrado los dos tramos.
Al día siguiente 12 horas para la bici, es posible hacerlo.
Y el tercer día en 12 horas una doble maratón es posible también.
Yo tengo que hacerlo, pero será cuando tenga tiempo para prepararlo, hacerlo es posible. Puedo hacer un Ironman estilo al de Vitoria en 15 horas casi sin entrenar, pero para hacerlo en 11 tengo que dedicarle muchos meses de planificación, pues igual el Ultraman, me gustaría hacerlo cuando pueda.
Tienes fama de no retirarte de ninguna carrera, termines como termines.
Hay una cosa que tengo muy clara, me he tenido que salir de alguna carrera por lesión pero el tema mental es fundamental, he llegado a carreras muerto, incluso con la bici al hombro, hice un duatlón durísimo aquí en Ronda y se me rompió la bici cuando llevaba solo 6 kilómetros, iba súper bien preparado, y me la eché al hombro hice 24 kilómetros de bici corriendo y después hice la carrera a pie y con todo no llegué el ultimo.
La dureza de la carrera la pones tú. Depende el ritmo que quieras llevar.
Si es verdad que creo que no haya carrera que se me pueda resistir. Puede que haga un día el Genal o Los Bandoleros, son extremas, necesita mucho entrenamiento, dejar de lado otras carreras que acostumbro hacer pero si la hiciera la termino en buen tiempo seguro, no mejor que los especialistas pero con buen tiempo.
No descarto nada.
¿Es saludable lo que hacéis?
El deporte es salud y lo que nosotros hacemos no es deporte. Hacemos barbaridades. Salud es salir a andar o a correr un día y hacer 10 kilómetros y ya está. Lo nuestro es menos saludable, te puede perjudicar si no tienes cuidado. Las articulaciones sufren mucho.
¿Tú entrenas mucho?
Sin buenos entrenos no llegas donde yo pero es verdad que mi genética me hace mantenerme mucho mejor que otro y también en la asimilación, yo en pocos meses empecé en la natación y pronto me puse en buenos tiempos, creo que es innato.
Pero creo que lo que mejor tengo es la mente. Hace tres años pinche en los 101 en Setenil y llegue listo, me quedaban los peores kilómetros de la carrera y llegue reventado, me aconsejaron abandonar varias veces, pero yo no puedo dejarlo. Llegue lejísimos de mi tiempo pero mientras yo vea que puedo poner un pie delante de otro no me retiro. Mi meta no era un kilómetro mas, yo cuando salgo tengo la meta entre ceja y ceja y no puedo abandonar. Y llegue, me paso todo el mundo, pero a mi me da igual.
Eres el ídolo de tus compañeros, ¿cómo lo consigues?
No lo sé. Creo que puede ser porque me ven disfrutar con lo que hago y que cuando nos juntamos todos disfruto más cada día. Me lo paso pipa entrenando y compitiendo con ellos, me gusta animar a los que vez en la competición que van sufriendo, no me limito a cerrar los ojos, me gusta animar a los que conozco en las pruebas. No me falta la sonrisa o la palabra de ánimo, quizás sea eso. Hay que disfrutar, desconectar el chip, siempre estoy de broma y a ellos les llama la atención, también su media de edad está en 30 años y verme a mí con 52 tacos les llamará la atención.
¿Crees que la administración local cuida el deporte?
Creo que el ayuntamiento facilita las cosas a los que hacemos deportes pero creo que las pruebas en Ronda son caras. Cuando vamos a una media maratón en Córdoba o Sevilla vale la mitad que aquí, debiera ser más barato. Creo que las instalaciones están bien pero por ejemplo la piscina tendría que ampliar el horario para nadadores que compiten o llevan un ritmo superior al resto, todos no podemos ir a las 7 de la mañana o a las 2 de la tarde y cuando vas a las 6 de la tarde te tienes que dar la vuelta porque no hay sitio. Deberían de ampliar las calles libres rápidas.
Por lo demás me gustaría agradecer públicamente el trabajo del trabajador de la Ciudad Deportiva, Antonio Molina, es una gran persona, atenta, su dedicación, amabilidad y su buena disponibilidad siempre hacia los deportistas es de agradecer. Da gusto.
Hasta los cincuenta iba mejorando mis tiempos pero a partir de ahí se trata de no perder la forma, cuesta mantenerse. Las marcas suben pero me conformo ahora de bajar en la maratón de 3 horas cuando con 45 años llegaba en 20 minutos menos. Pero me conformo, disfruto, todos vamos subiendo años y de mi categoría sigo estando arriba.
Yo no me veo sin hacer deporte, no puedo parar, el cuerpo tiene que estar activo si paras te estancas.
