Álvaro Macías es un joven jugador de fútbol arcense que se encuentra en Estados Unidos estudiando y practicando el deporte que más le gusta en una universidad del estado de Texas en donde está viviendo una experiencia nueva y donde compagina sus estudios con la práctica deportiva en un lugar del mundo donde saben aunar los estudios universitarios con el deporte preferido. Álvaro no se lo pensó dos veces cuando recibió la propuesta de marcharse al nuevo continente. "La oportunidad me surgió a través de contactos con amigos y representantes que se dedican a esa tarea. Yo mandé videos de mi etapa como jugador del Arcos y, a la vez, me exigieron un examen que hice en Sevilla. En lo deportivo, me pedían jugar, como mínimo, en Tercera División, requisito que yo cumplía ya que estuve en el Arcos en el año 2013. Ahora estoy de vacaciones, pero en agosto tengo que volver para iniciar la pretemporada. Ya tengo ganas".
Álvaro estudia en la Northwest Kansas Technical College, una universidad tecnológica enclavada en la localidad de Goodland (en la frontera de los estados de Kansas y Colorado) donde estudia 'Business', una carrera de empresas (algo parecido a la española de empresariales) y está muy contento porque el primer año de su estancia allí lo ha llevado todo muy bien, tanto los estudios como el deporte, lo que le da ánimo y moral para continuar en los U.S.A. En el equipo de los Maverick Soccer juega de centrocampista de banda ('Outside Midfield'). "En 20 minutos estoy en un estado o en otro y, además, gracias al fútbol estoy visitando muchos estados americanos, como Nebraska, Oklahoma o Colorado. En donde estoy le dan mucha importancia a los estudios ya que si falto alguna vez a clase o suspendo un examen no puedo jugar el fin de semana ni entrenar con los compañeros. Puede resultar duro o exigente pero es lo que te motiva para seguir estudiando. A mí, personalmente, es algo que me ha ayudado mucho porque académicamente era flojo, pero al apretarte las clavijas se consigue mucho más y el compromiso es mucho mayor".
Álvaro vive en el campus de la universidad de Goodland, a las afueras de la población, donde todo se encuentra a la mano y no hay necesidad de salir para otras cosas. Allí come, duerme, estudia y entrena. Con el idioma le va bien, ya que no le queda otra salida que aprender continuamente a comunicarse en inglés con todo el mundo, aunque ya llevaba una base adquirida en España. Tiene bastantes compañeros de procedencia latinoamericana y vive con un americano y un chileno. Al haber muchos estudiantes de distintos países, Álvaro está conociendo a personas de distintas nacionalidades y de diversa procedencia y está muy contento por ello. "En concreto, por las amistades que haces con tantas personas. Es una universidad mixta y cada deporte tiene equipos de ambos sexos y compartimos partidos. "El fútbol femenino estadounidense tiene un gran nivel y es mejor que el masculino, pero el 'soccer' (como se le llama al fútbol en E.E.U.U.) va ganando adeptos y tiene un gran tirón. De hecho, muchos jugadores europeos se están yendo para Norteamérica".
A Álvaro Macías le quedan tres años para acabar la carrera y tiene previsto quedarse a vivir en Estados Unidos si encuentra trabajo en el mundo de la empresa o en el del fútbol, porque allí hay más posibilidades laborales que en España. "El nivel de vida está muy bien y no hace falta mucho dinero para vivir allí, hay bastante trabajo. Yo, los fines de semana que tengo libres trabajo sin ningún problema para ganarme algún dinerito de bolsillo y no tener que pedir dinero a mis padres. Trabajo lavando platos en un campo de golf que hay donde yo vivo o en la cafetería del colegio. Todo bien". Álvaro se despide del entrevistador recomendando su experiencia a los jóvenes de Arcos, "sobre todo a los que les gusta estudiar y practicar deporte. Los americanos lo tienen todo muy bien ideado y la estrategia que tienen en el campus es perfecta: estudio y deporte durante todo el día". ¿Y las chicas estadounidenses? "Son buena gente, pero sobre eso mejor corramos un tupido velo".
