Al menos 19 personas murieron y más de cincuenta resultaron heridas al inmolarse una niña en una zona de bares de la ciudad de Maroua, en el norte de Camerún, informan hoy medios de ese país.
El atentado tuvo lugar el sábado por la tarde, y se produce tres días después de que un doble atentado suicida perpetrado por dos niñas causara otros 15 muertos en la misma localidad.
Bomberos, efectivos de los servicios de emergencia y personal de Médicos sin Fronteras se desplazaron al lugar de la explosión atender a las víctimas.
Según la televisión pública, la niña que se inmoló tenía solo 10 años.
Todos los indicios apuntan a la autoría de grupo extremista Boko Haram, que en las últimas semanas ha matado a más de 500 personas en Nigeria, Chad, Camerún y Níger.
El norte de Camerún ha sufrido numerosos ataques terroristas en los últimos meses.
El pasado 12 de julio, al menos 16 personas murieron en un atentado suicida en la localidad de Fotokol, también en el norte y muy cerca de la frontera con Nigeria.
Desde entonces, Camerún ha reforzado sus medidas de seguridad para evitar más atentados. Una de estas medidas es la prohibición del uso del velo integral por las mujeres en el norte del país.
Desde el pasado mes de febrero, una fuerza multinacional formada por Nigeria, Chad, Camerún, Níger y Benín combate a Boko Haram en el noreste de Nigeria y las zonas fronterizas con los países vecinos.
La ofensiva logró durante meses importantes avances contra el grupo islamista, pero ahora parece estancada por la mayor movilidad de los milicianos.
En respuesta a esta fuerza regional, Boko Haram amenazó con extender su campaña de ataques a los países vecinos y ya ha perpetrado sus primeros atentados suicidas en Chad y Camerún, que han costado la vida a decenas de personas.
