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Sevilla

Un jurado enjuicia este viernes a un chino que intentó sobornar a un agente para que no lo multara

En su escrito de acusación, el Ministerio Público pide para el imputado, identificado como W.C. y con estancia regular en España, cuatro años de prisión y el pago de una multa de 4.860 euros

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Un jurado popular enjuiciará este viernes en la Audiencia Provincial de Sevilla a un ciudadano chino acusado de intentar sobornar con 340 euros a dos agentes de la Guardia Civil para que no lo denunciaran por las distintas irregularidades que presentaba su vehículo, hechos por los que la Fiscalía le pide cuatro años de cárcel.

   Fuentes judiciales han informado a Europa Press de que el próximo viernes tendrá lugar la constitución del jurado popular y la celebración del juicio, tras lo que será a la siguiente semana cuando el magistrado-presidente haga entrega del objeto del veredicto a los miembros del jurado.

   En su escrito de acusación, al que ha tenido acceso Europa Press, el Ministerio Público pide para el imputado, identificado como W.C. y con estancia regular en España, cuatro años de prisión y el pago de una multa de 4.860 euros por un presunto delito de cohecho.

   Los hechos tuvieron lugar sobre las 9,00 horas del 14 de noviembre de 2013, cuando el acusado fue sorprendido por agentes de la Guardia Civil cuando conducía un vehículo Renault por el kilómetro 6,500 de la carretera SE-30.

   Al comprobar los agentes que dicho vehículo presentaba un "evidente" exceso de peso, requirieron al imputado para que les acompañase hasta el muelle del Centenario a fin de proceder al pesaje del coche, orden que cumplió el procesado.

   Una vez que los agentes comprobaron que el vehículo circulaba con un 37,85 por ciento de exceso de peso, así como otras irregularidades de carácter administrativo, se dispusieron a confeccionar los correspondientes boletines de denuncia, momento en el que el acusado, "con la finalidad de evitar que redactasen los citados boletines, les ofreció en reiteradas ocasiones 340 euros".

   En ese momento, los guardias civiles le informaron de que dicha actitud era constitutiva de delito, pero el imputado, "lejos de desistir en su actitud", llegó a dejar en el asiento del vehículo oficial de la Guardia Civil los 340 euros antes señalados, procediendo en ese momento los agentes a su detención y a la intervención del dinero ofrecido.

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