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Sevilla

La madre y la hermana de un triple parricida también sufrían esquizofrenia

La madre y la hermana del esquizofrénico que el pasado 28 de febrero mató a tres miembros de su familia padecían la misma enfermedad, según informes médicos aportados a la causa en el juzgado de Dos Hermanas

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La madre y la hermana del esquizofrénico que el pasado 28 de febrero mató a tres miembros de su familia padecían la misma enfermedad, según informes médicos aportados a la causa en el juzgado de Dos Hermanas (Sevilla).

Fuentes del caso han informado a Efe de que el autor del triple parricidio, Luis Miguel Briz, de 34 años, se encuentra internado en el Hospital Psiquiátrico Penitenciario de Sevilla y está siendo sometido a estudios psiquiátricos para determinar si es imputable desde el punto de vista penal.

El pasado 28 de febrero, el acusado degolló a su hermana de 36 años y a sus padres en el transcurso de una discusión en el domicilio familiar de Dos Hermanas (Sevilla) de la que el propio imputado recuerda pocos detalles.

En el transcurso de los estudios a que ha sido sometido se ha determinado que su madre y su hermana también padecían esquizofrenia, por lo que el juzgado ha reclamado a los hospitales las correspondientes historias clínicas.

Según el testimonio de Briz, su madre y hermana tenían instaurado un tratamiento farmacológico pero en ocasiones no lo tomaban, al igual que él mismo.

El juzgado se encuentra a la espera de recibir los informes que están preparando dos psiquiatras sobre la imputabilidad del acusado para remitir la causa a la Audiencia de Sevilla y celebrar juicio ante un jurado popular.

Luis Miguel Briz degolló a todas las víctimas con un cuchillo de cocina y en el caso del padre, Donato Briz, lo apuñaló más de veinte veces, aunque muchas de estas heridas y cortes los recibió mientras intentaba defenderse.

Su madre, Ángela Torrico, de 62, también murió degollada y presentaba algunas heridas fruto de su intento por defenderse, mientras que su hermana, que fue la primera víctima, fue sorprendida y no pudo reaccionar.

Luis Miguel estaba diagnosticado de esquizofrenia, tenía antecedentes policiales del año 2003 por resistencia y los padres habían denunciado en ocasiones su desaparición.

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