A última hora se concertó lo que Pepe Mel venía solicitando de mil formas desde Navidades. El segundo refuerzo del Betis, tras la llegada del uruguayo Molins, es el delantero del Parma, Dorlán Pabón, que llega cedido a la entidad heliopolitana hasta el próximo mes de junio. La incógnita de la operación es saber si el Betis se guarda una opción de compra, o ni siquiera eso, ya que apuntan que el delantero colombiano habría pasado reconocimiento médico, incluso tendría un precontrato acordado con el Monterrey mexicano para marcharse a tierras americanas el próximo verano.
Pabón viene a reforzar una parcela que hasta la fecha viene funcionando a la perfección pero que escasea de efectivos. Sólo Jorge Molina y Rubén Castro son considerados ‘nueves’ en el conjunto bético y, tras barajarse muchos nombres, el del Parma se ha convertido en la opción preferente. Se trata de un delantero menudo, de tan sólo 1,68 metros de altura y que destaca por su punta de velocidad. Sus movimientos le permiten estar siempre en boca de gol. También sobresale en la habilidad que ofrece cuando pisa el balón y en su efectividad en lanzamientos desde larga distancia.
No ha destacado mucho en Italia desde que llegase el pasado mes de julio procedente del Nacional de Medellín de Colombia a cambio de cuatro millones. El jugador, de 25 años, ha disputado trece partidos con el Parma y ha logrado un gol. Es el primer colombiano en la historia del Betis.
