El Málaga ha recuperado confianza, con "pegada" en su ataque y la calidad individual, con la goleada (4-0) a un Granada que careció de efectividad, pese a su dominio y a disponer de las mejores ocasiones, sobre todo en la primera parte.
El Granada se presentó en La Rosaleda con muchos problemas, sobre todo de clasificación, aunque en este recinto otros equipos, como la Real Sociedad, lograron rehabilitarse tras ganar y llegar prácticamente desahuciado a Málaga, sobre todo su técnico Juan Antonio Albacete Anquela.
El conjunto granadino, necesitado, salió de manera ofensiva, sin contemplaciones y con más ritmo que el Málaga. Avisó Ighalo con un disparo que salió a córner y en esa misma acción Diakhaté con un excelente remate de cabeza hizo intervenir con una parada extraordinaria a Caballero.
Sufría un sorprendido el Málaga, que tenía muchos problemas para construir, sin entrar en juego Portillo y con escasos espacios Isco y Joaquín.
El Granada con espacios dominaba e Ighalo volvió a tener una clara oportunidad, que mandó fuera. Veinticinco minutos duró el dominio granadino, porque el Málaga cogió el mando.
Un minuto después, un error del central senegalés Diakhaté, que se resbaló en la cesión del balón de un compañero, lo aprovechó Joaquín, para batir por bajo a Toño. El encuentro había cambiado por completo con un Málaga más incisivo y participativo.
El Granada intentó salir al contragolpe con rapidez, pero el Málaga apenas si dejó huecos. Gámez, disparó al larguero y luego un pase de Portillo, lo aprovechó Saviola, para recortar dentro del área y con tiro raso conseguir el segundo del encuentro (minuto 33).
Efectividad completa del Málaga, que llegó dos veces y marcó, ante un Granada negado en ataque, que tuvo por parte de Ighalo, Iriney, Torje y Siqueira, la oportunidad de acortar diferencias con cuatro ocasiones muy claras, pero entre el guardameta Caballero, la inoperancia y la mala suerte, dejaron el 2-0 al descanso.
El técnico malaguista Manuel Pellegrini sustituyó a Monreal y situó en el doble pivote al chileno Manuel Iturra, retrasando a Eliseu al lateral izquierdo. Su homólogo Anquela, quitó a Dani Benítez, por Jaime.
El Málaga ya no dejaba tantos huecos y el Granada tenía más problemas para crear y atacar. El encuentro fue insulso durante muchos minutos, sin ocasiones.
Ighalo disparó al poste en el minuto 67, y ahí despertó el Málaga, que volvió a coger el mando del partido con varias acciones de Joaquín y de Portillo.
La sentencia definitiva llegó tras una falta lanzada por Joaquín que remató Weligton y en última instancia Camacho tocó de cabeza, entrando por la escuadra en el minuto 75.
El Granada, desolado por tanto esfuerzo y trabajo y escasa recompensa, bajó el ritmo y el Málaga lo aumentó, aprovechando los errores para marcar por medio de Santa Cruz, a pase de Buonanotte.