Un juzgado de Sevilla ha imputado un homicidio doloso consumado y otro en tentativa a un joven de 18 años que arrolló con su coche a un ciclomotor con cuyos ocupantes había mantenido una discusión previa.
El juzgado de instrucción 1 de Sevilla, en un auto al que ha tenido acceso Efe, acuerda tramitar según la Ley del Jurado los hechos ocurridos en la madrugada del pasado 28 de mayo en la barriada de las Tres Mil Viviendas, cuando un vehículo Fiat Punto conducido por Juan José S.C. arrolló a un ciclomotor ocupado por dos personas, cuyo conductor, Jesús T.L., de 30 años, falleció unos días después en el hospital.
Los hechos se produjeron después de que el copiloto del ciclomotor, Juan Pedro G.V., mantuviese una "breve discusión" con el acusado, según el auto.
El ciclomotor continuó la marcha hasta que se cruzó con el vehículo conducido por Juan José, quien "al percatarse dio la vuelta, se puso detrás del ciclomotor en la calle Escultor Sebastián Santos, aceleró y cuando la moto se encontraba en una zona de obras que impedía su escapatoria", el acusado colisionó con ella por detrás, cuando circulaba "a una velocidad mínima de 92 kilómetros por hora", según el auto.
Además del fallecimiento del motorista, el copiloto sufrió rotura y estallido del bazo, hemiperitoneo, dos laceraciones renales, una herida en la frente y una abrasión en la muñeca", lesiones por las que estuvo nueve días hospitalizado y de las que aún no ha recibido el alta definitiva de sanidad.
La juez, por ello, no considera que se trate de un homicidio imprudente derivado de un accidente de tráfico e imputa al conductor un delito de homicidio consumado y otro en grado de tentativa, que serán enjuiciados por un jurado popular en la Audiencia de Sevilla.
El imputado fue detenido poco después en su vivienda de la barriada de Los Pajaritos.
La víctima dejó tres hijos de 5 años, 2 años y dos meses y su familia se ha personado como acusación particular en la causa.
Por su parte, la familia del conductor, que permanece en prisión por orden judicial, ha afirmado en diferentes ocasiones que solo fue un accidente debido a que el joven tenía solo dos meses de carné de conducir y "se le fue" el coche.
Sin embargo, el superviviente del accidente, de 21 años, declaró el pasado 22 de junio ante la juez y aseguró que el coche que los arrolló "venía acelerando" y "a mucha velocidad" desde 50 o 60 metros atrás y en un tramo recto.
Según este testigo, los dos grupos tuvieron un incidente minutos antes, cuando el conductor del vehículo "le miró mal y tiró un escupitajo al suelo".
Afirmó que el Fiat Punto, tras cruzarse con el ciclomotor, dio la vuelta en una rotonda y "empezó a perseguirlo a mucha velocidad" y que "no es cierto" que la moto saliera de un lateral de la vía sino que circulaba por el tramo recto de la calle y el denunciado "empezó a acelerar desde lejos".