Que si la bajada de pantalones del presidente. Que si entrar supondría el olvido de Biris en la ‘guerrilla’ por destronar a Del Nido. Que si la defensa a ultranza de un estadio sin violentos... Temas a debate que, a partir de ahora, se verán si continuan en el candelero o no. Y es que un resultado, y más aún un 5-1 frente al Betis, lo puede llegar a cambiar casi todo.
Pero lo cierto y verdad es que Biris Norte regresó el domingo a su grada y se notó. El despliegue de cánticos, banderas y colorido es una garantía cuando uno de los colectivos de aficionados más antiguos del Sevilla ocupan la graba baja del Gol Norte del Pizjuán. Una fuerza añadida a la ya compleja empresa de que los rivales puntúen en el coso nervionense.
“Comienza el espectáculo” dictaminaba una de las dos pancartas que Biris desplegó en su vuelta. Pocos lo pueden discutir, y menos aún cuando hasta los que pitaban a estos en tiempos de gracias ahora solicitaban a gritos el regreso del mejor apoyo de todos. Ciertamente, el Sánchez Pizjuán se estaba convirtiendo en un desolador cementerio.
“Disculpen la tardanza”, segundo lema mostrado por el grupo. Este justo detrás de la portería. Un método efectivo para recuperar el apoyo del resto de la afición. Sin dudas, en este derbi también ganaron Del Nido y Biris Norte.