En su vida política, se incorporó a las filas socialistas en 2005 y ya en las últimas elecciones formó parte de la lista de la formación, aunque se quedó a las puertas del Ayuntamiento. Ahora, a sus 46 años asume uno de los retos más importantes de su vida, la Secretaría local del PSOE.
—¿Cómo son las primeras horas tras ser nombrado secretario local del PSOE?. ¿Y los días previos al Congreso?
—Pues son horas de felicidad en lo personal, y de ilusión y de satisfacción por el consenso alcanzado propio de un partido maduro y asentado. La responsabilidad es doble y se llama nada más y nada menos que Chiclana y PSOE. En cuanto a los días previos, sobre todo, el sentimiento de emoción y la sensación de que somos muchos los que estamos remando en la misma dirección.
—¿Qué le impulsó a presentarse a la Secretaría local del PSOE?
—Cuando uno se decide a participar en política de manera activa debe estar dispuesto a lo que el partido y su militancia tengan a bien. Unas veces el compromiso es mayor y otras veces de menor entidad aparente, pero siempre útil y necesario para el partido.
—¿Cuáles son los objetivos primordiales para los próximos meses en el partido?
—Ayudar a recuperar la credibilidad de Chiclana que se ha perdido en la primera etapa de la legislatura, mostrarnos como un partido fuerte y unido, trabajar para hacer llegar nuestra voz y nuestra ideología a todos los rincones de la ciudad y dar una cobertura adecuada a los compañeros del grupo municipal y al alcalde de la ciudad.
—Primeras medidas como secretario local del PSOE. ¿Habrá continuidad respecto a los últimos años, cambios poco a poco o una renovación drástica para afrontar los próximos años?
—Eso lo tenemos que planificar con detenimiento y reflexión. Hay que buscar el equilibrio entre renovación y experiencia. No podemos renunciar a nuestra historia pero tampoco nos vamos a quedar parados. Tenemos que evolucionar al mismo tiempo que lo hace la ciudad.
—¿Qué necesita el Partido Socialista de Chiclana para volver a recuperar la hegemonía que tenía antes de las elecciones municipales de mayo de 2007?
—Mostrarnos como el partido unido y capaz que somos. Si nos ponemos a trabajar centrados en escuchar a los ciudadanos e intentar solucionar sus necesidades, tendremos mucho ganado. No nos faltan argumentos ideológicos, ni personas para llevarlos a cabo. Pero hay que hacer un especial esfuerzo para no perder de vista el objetivo de nuestras políticas ,que no es otro que el ciudadano.
—Tras perder la mayoría absoluta, ¿cuál será la estrategia para recuperar la mayoría en 2011, tras lo ocurrido en las últimas municipales?
—Sinceramente creo que debemos incrementar la pedagogía política para que los ciudadanos se den cuenta del mérito de nuestra gestión. Tenemos que volcarnos en explicar las acciones políticas para que los chiclaneros y chiclaneras las valoren. Mi función será la de convencer a esos ciudadanos de que el PSOE es la opción más sólida y creíble para defender sus intereses.
—Viéndose desde fuera, tras quedarse a las puertas del Ayuntamiento, ¿cómo se prevé el resto de la legislatura tras la moción de censura, con el gobierno de coalición entre PSOE, PSA e IU? ¿qué opina sobre el cuatripartito que gobernó en la ciudad durante un año y medio?
— Yo nunca he estado fuera porque participo del proyecto político que en este momento llevan a cabo mis compañeros en el Ayuntamiento. En cuanto al resto de la legislatura, estoy convencido de que va a ser muy productiva para la ciudad, ya se está viendo un trabajo intenso y pronto se percibirán los resultados. Respecto al anterior equipo de Gobierno, con todo el respeto, creo que cometieron dos errores de partida: el primero, les motivaba más el ir contra José María Román y el PSOE que a favor de la ciudad; y el segundo, se repartieron las áreas sin más, descuidando la coordinación necesaria para que cualquier proyecto, más una ciudad, funcione.
—¿Qué opinión tiene de los grandes proyectos para la ciudad como el tranvía, la Ronda Oeste, el centro comercial La Longuera, la Plaza Mayor, Miralrío, etcétera?
—Pues suenan bien, suenan a proyectos viables e imprescindibles para crear empleo y construir una Chiclana más moderna y más desarrollada en todos los sentidos. Suenan a proyectos del PSOE, suenan a planificación y una idea planificada de ciudad.
—¿Qué opina de la crispación política en la ciudad y de la judicialización que se ha hecho de ella en los últimos años?
— Me gustaría contribuir a terminar con la crispación política. Si queremos que los ciudadanos nos respeten debemos ofrecerles respeto. Uno de mis objetivos inmediatos es buscar el entendimiento y el consenso sobre las reglas del juego con todos los partidos políticos de la ciudad. En cuanto a la judicialización, el tiempo, la Fiscalía y los jueces demuestran que sólo es un arma política que creo que no beneficia a nadie y que hace sufrir a muchas personas innecesariamente.
—Tras el anuncio de su elección como secretario local del PSOE, han surgido críticas sobre su lugar de nacimiento. ¿Qué puede decir al respecto?
—Pues que todas las opiniones son respetables, pero permíteme una reflexión: el lugar de nacimiento no se escoge pero sí a quien amas o lo que amas. Creo que el azar y los sentimientos no son comparables.
