Con la rúbrica de este convenio, suscrito por las asociaciones mayoritarias del sector con presencia en la mesa de Gobierno -Unión Sevillana del Taxi y la Asociación Solidaridad Hispalense- finaliza un largo proceso de negociaciones, que culminó el pasado 9 de diciembre con la votación de la propuesta en una asamblea, como ya avanzó Viva Sevilla.
El acuerdo, por el que los taxistas también tendrán que pagar una tasa municipal -150 euros trimestrales por licencia en activo destinados a financiar los servicios administrativos del Instituto del Taxi y a la modernización de la flota, entre otros- no cuenta con el consenso total del gremio, ya que muchos ven este convenio “precipitado” y que “no se ajusta a las verdaderas necesidades del sector”.
“No apoyamos el proyecto porque pensamos que este plan no va a mejorar la situación actual”, señaló a esta publicación Emilio López Benítez, presidente de la Asociación Gremial Auto Taxi de Sevilla, conocida como Plataforma Santa Justa, que cuenta con más de 200 socios.
Sobran 462 licencias
“La Unión Sevillana y Solidaridad Hispalense fueron las que negociaron con el Ayuntamiento. Tenemos que aceptar lo firmado, a pesar de que no votamos en la asamblea, porque se tendría que haber buscado durante más tiempo una solución de garantías”, señaló López, que piensa que muchos compañeros no van a poder aguantar en el negocio durante los cuatro años en los que estará en vigor el plan.
“Como primer paso la medida no está mal, pero demandamos la solicitud de un préstamo para que así se puedan acortar los plazos. Necesitamos ver los beneficios en menos tiempo, por lo que propusimos rescatar 150 licencias en 2012 y otras 150 durante los tres siguientes años”, puntualizó.
Según un estudio realizado por la empresa INIX, en la actualidad sobran 462 licencias y el número de taxis que necesita la ciudad debería de pasar de los 2.234 que existen hoy en día a 1.772.