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Torremolinos

Romería en honor al Patrón

La tradicional Romería de San Miguel superó un año más todas previsiones en cuanto a buen ambiente y participación popular

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  • Jornada plena de buen ambiente y ausencia de incidentes -
Torremolinos volvió a vivir la gran jornada de prólogo a su Feria con gran intensidad. La tradicional Romería de San Miguel superó un año más todas previsiones en cuanto a buen ambiente y participación popular. Más de 250.000 personas vivieron un día especialmente significativo, pletórico de alegría y color y, afortunadamente, huérfano de incidentes, a pesar de la gran movilización ciudadana que supone esta celebración en los pinares del municipio.
Desde hora muy temprana, miles de ciudadanos, pertenecientes en su gran mayoría a variopintos colectivos y entidades del municipio, iban conformando el largo y animado cortejo, formado por más de 70 carretas y remolques, aquéllas tiradas por bueyes y éstos por tractores, a los que se sumaban centenares de caballistas y decenas de miles de "romeros" que, desde el primer momento y ante un numerosísimo público que se iba apostando a uno y otro lado de cada vía del recorrido, dejaban patente su fervor al Santo Patrón, San Miguel, y también sus ganas de divertirse durante los aproximadamente cuatro kilómetros del casco urbano por donde la caravana multicolor se convirtió en eje de todas las miradas, sobre todo de los numerosos turistas y visitantes.
El alcalde de Torremolinos, Pedro Fernández Montes, acompañado por el presidente de la Hermandad de San Miguel, Domingo Avisbal, y los miembros de su Equipo de Gobierno, abrieron un año más este singularísimo peregrinaje por el "corazón" de Torremolinos, cada uno de cuyos rincones se convirtió durante toda la mañana en una gran fiesta, en la que el cante y el baile no cesaron hasta la llegada a los respectivos puntos de acampada elegidos previamente por los miembros de las peñas y ciudadanos en general, que se iban sumando al cortejo de forma espontánea, multiplicando paulatinamente la afluencia y haciendo crecer el extraordinario ambiente de sana alegría.
Ya en los pinares, la consumición de miles de vriados platos, la gran mayoría de ellos elaborados con antelación, ya que sigue vigente la prohibición de la Junta de Andalucía de hacer fuego en todo ese entorno, se fundió con la sana alegría expresada a través de cantes y bailes, que marcaron el discurrir de las primeras horas de la tarde, hasta las cinco, momento en el que se inició, en la ermita de San Miguel, la tradicional Misa en honor al Patrón, cantada por el Coro de San Miguel y en la que el color de los trajes de faralaes y el inequívoco ambiente festivo no restó un ápice de solemnidad al acto religioso oficiado por el párroco Guillermo Tejero.
Concluida la misma, la fiesta inundó nuevamente cada rincón del "pulmón" vegetal de Torremolinos, en el que las imágenes más típicas de una celebración plenamente andaluza se fundían con las más insospechadas, en muchos casos de turistas con improvisadas indumentarias que evidenciaban su decidida vocación de integrarse plenamente en la alegría general.
La ausencia de incidentes fue otra de las características destacadas de la jornada, debido tanto al excelente comportamiento de los participantes como al amplio dispositivo desplegado para la ocasión por el Ayuntamiento, que previó un contingente humano de actuación durante toda la jornada formado por casi 250 personas, de las que más de un centenar fueron miembros de la Policía Local y el resto efectivos de Protección Civil, Bomberos, Delegación de Limpieza Viaria, Delegación de Medio Ambiente, Servicios Técnicos, Delegación de Bienestar Social, Delegación de Cultura y Fiestas, SAMSET y ASTOSAM.
Las condiciones meteorológicas fueron también un gran aliado para el éxito de la fiesta, lo que propició el incremento de participantes respecto a ediciones anteriores, no sólo de los propios vecinos de Torremolinos, que lógicamente se vuelcan cada año con su Romería, sino también de ciudadanos de otros muchos puntos de la provincia y, sin duda, de otros muchos puntos de la geografía española y del extranjero.
Torremolinos, superada ya su Romería, vive ya su Feria, en la que un amplísimo programa de actividades garantiza la diversión de quienes se sumen a la misma. El carácter totalmente abierto de esta Feria, que es una de sus principales características, permite un año más que visitantes y turistas puedan integrarse plenamente en ese universo de diversión en que se convierte Torremolinos.

El Pinar de Los Manantiales recupera su estado normal tras una intensa labor de limpieza
Los servicios de Limpieza Viaria del Ayuntamiento de Torremolinos finalizaron el pasado lunes, día 27 de septiembre, las tareas de limpieza iniciadas el domingo nada más concluir la tradicional Romería de San Miguel, habiendo retirado de los pinares de Los Manantiales, principal escenario de la misma, todos los residuos depositados durante la jornada.
Las tareas de limpieza, , que se llevaron a cabo sin interrupción durante la tarde del pasado domingo 26 de septiembre y la jornada del lunes 27, fueron ejecutadas por un contingente humano de 30 personas, que utilizaron varios camiones para la retirada de los residuos acumulados, lo que permitió devolver de inmediato su mejor imagen al emblemático espacio natural de Torremolinos.
La cada vez más profunda concienciación ciudadana sobre la importancia que tienen los pinares de Torremolinos y la incansable actividad desplegada por los servicios municipales han permitido que éstos se encuentren en perfecto estado para el disfrute de vecinos y visitantes, muchos de los cuales, pese a la cercanía en el tiempo de la Romería, desean ya cuanto antes poder desplazarse nuevamente a este lugar para disfrutar allí de una jornada de asueto.



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