Dos dotaciones de la Policía Municipal de Málaga tuvieron que dispersar pasadas las cinco de la madrugada del pasado sábado 4, a grupos de jóvenes que se encontraban en ese momento en la Plaza de San Francisco consumiendo bebidas alcohólicas y dando voces frente a una de las dos salas de fiestas que hay en ese punto cercano a calle Carretería, y que se mantiene abierto hasta las siete de la madrugada, cinco días por semana.
Los agentes acudieron a la zona alertados por los residentes que se vienen quejando desde hace meses que la apertura hasta esas horas de las dos discotecas, 'The Club' y '404 Not Found', y el público que sale de las mismas para consumir bebida con envases y a fumar en el exterior, les desvela por el alto volumen de los gritos y voces que emiten. A ellos se unen, según afirman, decenas de personas que tras el cierre de otros bares, sobre las dos de la mañana de la calle Nosquera, deciden concentrarse para consumir alcohol alrededor de la fuente y a las puertas de la Cofradía de la Paloma.
Precisamente, los responsables de la entidad religiosa han denunciado en la Policía las reiteradas pintadas que se efectúan en sus paredes, y la presencia de orines en la puerta principal de acceso, actos sancionados por la Ordenanza Municipal que se hacen de madrugada.
Los agentes dispersaron el sábado a los grupos de jóvenes y procedieron a solicitar la documentación de permiso de apertura municipal a los responsables de la discoteca 'The Club' (antes Spectra), para elaborar luego el correspondiente informe de intervención.
INTERVENCIÓN EN NOVIEMBRE
Según los vecinos, durante el mes de noviembre pasado, la Policía Local tuvo que intervenir también por los avisos de contaminación acústica. En el caso de ambas salas se levantaron actas de denuncia por ocupación de la vía pública careciendo de la correspondiente autorización.
Además, miembros del G-16 comprobaron el aforo en el interior de 'The Club', levantando un acta por sustancia estupefaciente y otra por desobediencia a agentes de la autoridad, así como una denuncia a la Ordenanza de ruido.
Los residentes vienen quejándose desde hace años que estas concentraciones en Plaza San Francisco, y las alteraciones del descanso vecinal nocturno, son equiparables a las de Plaza Mitjana, que dieron lugar a una condena por negligencia del Ayuntamiento de Málaga en 2021, por parte del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
