El padre de la niña Desirée, José Manuel Leal, ha sido citado a declarar el próximo 19 de julio por un juzgado de Lugo por supuestas amenazas al novio de Ana Sandamil, condenada por el crimen de su hija en Cospeito (Lugo) en mayo de 2019.
José Manuel Leal está llamado a los juzgados de Lugo un día después de que el próximo 18 de julio se celebre en el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), en A Coruña, la vista del recurso por el crimen que ha presentado la que fuera pareja del padre de Desirée.
En concreto, Ana Sandamil fue condenada a prisión permanente revisable por la Audiencia Provincial de Lugo después de que un jurado popular emitiese un veredicto de culpabilidad sobre el asesinato de la pequeña, que tan solo contaba con siete años de edad cuando fue brutalmente asesinada en la casa de la madre en Muimenta (Cospeito).
José Manuel Leal ha confesado, ante la denuncia de la pareja de Sandamil, que está "muy tranquilo", al tiempo que niega cualquier tipo de amenaza hacia ese individuo.
Además, ha constatado que el denunciante "va a llevar dos testigos, que no tienen veracidad ninguna". Así, ha dicho que "una es la amiga del monstruo", en referencia a Ana Sandamil, y otra "una amiga de la abuela". "Irán a declarar mentiras, como ya hicieron en el juicio en la audiencia en que lo único que fueron a decir es que era muy buena (Ana Sandamil), incluso hablaron mal de mi. Como dije en el juicio, tienen las manos manchadas de sangre al defender a una asesina", ha clamado.
Del recurso, José Manuel Leal ha exteriorizado que espera que "se siga manteniendo la condena impuesta por la sección segunda de la Audiencia Provincial de Lugo, con jurado popular", de prisión permanente revisable.
"No veo ninguna circunstancia para que se modifique la condena. La sentencia es clara, de hecho el jurado la mayoría menos uno, votaron a favor de esa condena. Lo que pasa es que uno siempre está con esa incertidumbre y hasta que pase el proceso no estaré tranquilo. Ojalá siga todo igual", ha deseado.
El juicio por el asesinato de Desirée se celebró en las primeras semanas de febrero de este año, donde se constataba que la pequeña había muerto por asfixia el mismo día que la tenía que recoger su padre dentro del régimen de visitas establecido con Sandamil.
