Agentes de la Policía Nacional han detenido el pasado 12 de mayo a un varón de 29 años identificado como F.J.G.R., en un domicilio situado en la localidad de Carrión de los Céspedes (Sevilla), donde el detenido, al que se le imputan presuntos delitos de quebrantamiento de condena y robo con violencia, intentaba pasar desapercibido para evitar así la acción de la justicia. Se trata del encartado que, tras ser detenido el pasado mes de febrero en una operación, huyó del entorno de los juzgados del Prado de San Sebastián cuando estaba siendo conducido por unos agentes.
El pasado día 3 de febrero, en el marco de la operación Góndola- Carkmark, la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Guardia Civil, desarticuló totalmente en Dos Hermanas la banda de aluniceros más activa de toda Andalucía. A los investigados se les relacionó con más de 50 robos cometidos en menos de tres meses en las provincias de Sevilla, Cádiz, Málaga, Córdoba, Jaén, Granada, Almería y Ciudad Real.
Los agentes detuvieron a los siete integrantes de la organización criminal, que llegó a desvalijar hasta seis comercios en una misma noche, y pudieron recuperar más de 30 vehículos -la mayoría de alta gama- empleados para cometer alunizajes a gran escala, superando el valor de los efectos sustraídos el millón de euros.
Todos los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 13 de Sevilla, decretando el juez ingreso en prisión para los cuatro cabecillas de la banda.
Cuando se iniciaba el traslado a prisión de los detenidos, uno de los principales responsables del grupo criminal que se encontraba bajo custodia de los agentes logró mañosamente liberarse de los grilletes de seguridad y emprendió la huida a toda velocidad, no pudiendo los mismos darle alcance al montarse el prófugo velozmente en un vehículo que se encontraba en marcha en la vía pública, siendo utilizado el mismo para alejarse del lugar lo más rápido posible, no importándole que el dueño del vehículo se encontrase en el interior del mismo, poniendo además ambas vidas en peligro.
La huida finalizó en la localidad de Los Palacios y Villafranca, donde el delincuente puso en libertad al ciudadano, sin tener que lamentar incidentes.
A raíz de estos hechos, el Grupo II de la Brigada Provincial de Policía Judicial inició una investigación al objeto de localizar y detener al fugado, siendo localizado en la localidad de Carrión de los Céspedes, donde intentaba pasar desapercibido para evitar la acción de la justicia.
La mañana del 12 de mayo se llevó a cabo un dispositivo policial en las inmediaciones del domicilio del alunicero, que tenía como objetivo su aprehensión y puesta a disposición judicial, si bien en un momento dado, al percatarse de la presencia policial, intentó una nueva huida a pie campo a través, dándole alcance a pocos metros de emprenderla los policías intervinientes, los cuales procedieron a su detención, comprobando también que al mismo le constaban dos requisitorias judiciales de Sevilla y Montilla (Córdoba), que fueron también tramitadas durante esta intervención.
Finalmente fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 13 de Sevilla y del Juzgado de Instrucción de Guardia en virtud de las requisitorias, imputándole al mismo los delitos de quebrantamiento de medida judicial y robo con violencia, dictaminando el juez su inmediato ingreso en prisión.